La imaginación es la herramienta más increíble que tiene la humanidad, una que hace que avancemos hasta más allá de nuestros límites una, otra, y otra vez. Cierto es que a veces se nos va la mano pero eso nos ayuda con cambio, la versatilidad, y a prever situaciones a futuro. Hoy os presentamos la última y más atrevida figuración urbanística.
El efecto mal llamado “superpoblación”, unido a la necesidad de romper barreras y el desgaste de ideas para prevenir los efectos del Cambio Climático han hecho que unos profesionales diseñen la que es, hasta ahora, la apuesta urbanística más importante de la humanidad: The Line. Como su nombre indica no es más que eso, una línea, una línea de 170 kilómetros.
La empresa Neom es la encargada de dar vida a este proyecto que pretende ser la punta de lanza del urbanismo del futuro. Se trata de una ciudad para nueve millones de personas, de 170 kilómetros de largo, 500 metros de alto, 200 metros de ancho y fachadas totalmente revestidas de espejos. ¿Estás sorprendido? Pues espera, que aún hay más.
Se construirá en el Mar Rojo, en una zona costera de Arabia Saudí, y como podrás imaginar, estamos hablando de un rascacielos, dado que toda esta enorme extensión construida estará conectada de principio a fin. De hecho, la mega estructura se simplifica en dos enormes paredes que atrapan un espacio libre interior, similar a un megapatio, con abundante vegetación, zonas de tránsito y esparcimiento.
Por supuesto, en su interior habrá residencias de todo tipo y condición, zonas comerciales y de ocio, parques y escuelas. Aunque, curiosamente, no he leído que tengan industrias, así que imagino que todo será importado. Ambas “paredes” estarán conectadas en distintas alturas y de diversas formas por puentes, la mayoría con espacios verdes. Incluso se puede ver en el vídeo algún macetero que rompe las reglas de la gravedad.
Una de las cosas más increíbles que prometen es que en tan sólo en 20 minutos se podrá visitar un extremo y su opuesto mediante un innovador sistema de transporte. Otra promesa es que la ciudad se proveerá únicamente de energías renovables, siendo una alternativa a las ciudades tradicionales.
Las pretensiones del promotor, el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, son salir de la dependencia económica del petróleo, construyendo un lugar inesperado. Una lanza que, durante su vida útil, provea a sus usuarios de experiencias gratificantes, al mismo tiempo que sirve como cuidado del medio ambiente y de la zona en concreto.
The Line está pensada para que las necesidades de sus ciudadanos se solventen con tan sólo caminar cinco minutos. Esto se consigue porque todo está en sólo una huella de 34 kilómetros cuadrados, con edificios de 500 metros de altura, con lo que se convertiría en una de las estructuras más altas del mundo, y la más larga jamás creada por el hombre.
Otra consecuencia directa de esta ciudad es que libera todos los espacios exteriores, dejando que un enorme espacio natural se desarrolle por sí mismo, teniendo un efecto más que positivo en la naturaleza. En concreto, el área protegida será de 26.500 kilómetros cuadrados. Dentro de las paredes no existirán los coches o los automóviles privados, todos sus usuarios se moverán por transportes “públicos”, evitando así la masiva contaminación.
Nos prometen que esta ciudad tendrá cero emisiones de carbono tanto en la construcción, en la que Neom se compromete a buscar los materiales más ecológicos, como durante el uso de las estructuras. Aunque Neom promete que las emisiones de carbono durante la construcción serán compensadas.
Seguro que como yo te preocupaste por la cantidad de aves que pueden colisionar contra semejantes murallas de espejos. Tarek Qaddumi, director ejecutivo de Neom, responde a esta preocupación diciendo que se están estudiando los recorridos migratorios de los distintos tipos de aves de la zona, y que siempre se aplicarán métodos que eviten la colisión de estos animales, como la utilización de vidrio fritado.
También es licito pensar que este proyecto es sólo una quimera, pero nada más lejos de la realidad. En abril de 2022 han comenzado los trabajos de pilotaje de la primera fase de The Line, y se espera que para el año 2030 la fase inicial esté operativa. Es decir, llegarán los primeros usuarios.
Para hacerlo más atractivo, los promotores indican que el 40% de la población mundial podrá llegar a The Line en un vuelo de seis horas, y que se encuentra en una ruta mundial del comercio. En todo caso, podemos ponerle todas las pegas que queramos, pero el hecho es que técnicamente The Line se puede ejecutar y, de facto, ya ha comenzado su construcción.
Una prueba de esto es que Neom ha sacado un video que circula por las redes, en el que se hace el mismo juego constructivo en un lugar tan emblemático como Nueva York. ¿Vivirías en una Nueva York lineal? ¿Crees que puede ser una ciudad cómoda? En fin, las apuestas están por todo lo alto.
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