(Foto: Christie's)
Tal y como se esperaba desde hace unos días, Shot Sage Blue Marilyn, la obra que realizó Andy Warhol en 1964 se ha convertido en la pintura del siglo XX más cara jamás vendida en una subasta. Christie’s vendió finalmente la obra en la noche del lunes por 195 millones de dólares, muy cerca de los 200 millones que se estimaban inicialmente. La puja se prolongó por unos cuatro minutos. No hizo falta mucho más para la decena de clientes que estaban presentes a través del teléfono y el resto de marchantes de arte que se agolpaba en la sala.
Fue precisamente de la misma sala de subastas en pleno Manhattan de donde salió la oferta ganadora. Los expertos presentes en la subasta identificaron rápidamente al presunto comprador. Se trataba del marchante de arte estadounidense Larry Gagosian. Lo que no se sabe por el momento es si ha adquirido la obra para su colección o, como es muy probable, ganó la puja en nombre de otro cliente.
Andy Warhol pintó esta obra en recuerdo de Marilyn Monroe tan sólo dos años después de la muerte de la artista. Usó para ello una compleja técnica de serigrafía de la que salieron cinco retratos de un metro cuadrado cada uno. Nunca volvió a usar este sistema por su complejidad. Warhol se inspiró en un fragmento de la fotografía promocional de la película Niágara, en la que participó la actriz en 1953. Su enigmática y sensual sonrisa cautivó al artista en esa foto.
La subasta de anoche bate el récord que hasta el momento ostentaba la obra Mujeres de Argel de Pablo Picasso, que se vendió por algo más de 179 millones de dólares en mayo de 2015. Sin embargo aún está lejos de los 450,3 millones de dólares que se pagaron por el Salvator Mundi atribuido a Leonardo da Vinci, que fue subastado en noviembre de 2017. Hasta anoche, el récord en subasta de un Warhol pertenecía a Silver Car Crash, un lienzo monumental que representa un accidente automovilístico, que se vendió por 105 millones de dólares en 2013.
El retrato de Andy Warhol formaba parte de un lote de 36 obras pertenecientes a la Fundación Thomas y Doris Ammann, con sede en Zúrich. Una institución que lleva el nombre del comerciante de arte y coleccionista suizo Thomas Ammann, amigo personal de Warhol, que murió de SIDA en 1993, y de su hermana Doris. Durante la velada se consiguieron 317 millones de dólares que serán destinados a financiar proyectos de esta fundación, que se dedica a mejorar la vida de los niños a través de proyectos de salud y educación.
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