Elige el papel pintado perfecto para esa habitación: guía de estilo y color

Cuando decoras una casa tienes que tener en cuenta que cada uno de los detalles contribuye a que el ambiente del espacio vaya en uno u otro sentido. Elegir el papel pintado que mejor se adecúe puede transformar un cuarto dándole personalidad, color y profundidad. El problema es que a veces hay demasiadas opciones disponibles y elegir el diseño perfecto puede ser un desafío. Por eso tenemos una guía que hará que seleccionar el papel para cada espacio de tu casa sea bastante más fácil.

Piensa en qué quieres en ese espacio

Lo primero es saber para qué usarás esa habitación y qué estilo quieres que tenga. Se ve más fácil con ejemplos. Un salón, que es el corazón del hogar y el lugar donde recibes a tus invitados, podría tener un papel que sea más elegante. Los patrones suaves o, si te atreves, los paisajes, harán que las charlas en el salón sean relajadas. En Photowall tienes opciones variadas en las que te querrás sumergir como un niño en una piscina en verano.

El dormitorio es un espacio más personal. En él, quizá quieres optar por papeles pintados que inviten a la serenidad, porque al fin y al cabo, la mayoría de tiempo que pasas en ella es para descansar. Te aconsejamos tonos suaves o escenas de naturaleza. Puedes reservar tu lado más creativo para la habitación de los niños: hay muchas opciones de papeles con temas de cuentos. Elige para esta habitación las formas coloridas y los críos se sentirán más inspirados en su espacio.

Ten en cuenta el tamaño de la habitación

Antes de dejarte llevar por los papeles pintados que más te gustan, tienes que pensar cómo de grande es esa habitación. Es normal dejarse llevar por los gustos, pero en espacios pequeños, los murales con patrones recargados pueden hacer que el espacio se vea aún más pequeño. Si la habitación es pequeña, mejor un diseño sencillo o un papel con tonos claros. Si, en cambio, tienes una habitación grande, un papel con patrones grandes o una temática más audaz, por ejemplo, un guepardo cruzando la selva, te ayudará a llenar el espacio y que no se sienta vacío.

En el caso de un pared muy grande, si no quieres que el diseño lo ocupe todo, puedes dividirla en secciones. Se lleva mucho combinar el papel con paredes lisas o que estén pintadas en colores neutros.

Si ya sabes qué quieres crear, estos colores te ayudarán

Cuando elijas el papel que quieras, tienes que tener en cuenta que el color tiene un impacto claro en nuestras emociones. El azul y el verde, por ejemplo, transmiten armonía y calma, pero también frescura. Los hemos visto tradicionalmente en los dormitorios, pero ahora se llevan también en salas de estar si quieres un ambiente relajante. El amarillo y el naranja, en cambio, son colores cálidos y enérgicos. Son ideales para la cocina o para la habitación infantil, en las que nunca estamos quietas. Fomentarán la creatividad y el juego.

Los colores neutros o colores pastel, servirán para cuarto en los que busques un ambiente equilibrado y que sea acogedor. Además, si tienes un elemento decorativo que quieras destacar, tipo una lámpara, o un cuadro, los colores pastel y neutros te ayudarán a resaltarlo. Los colores oscuros también se pueden usar en la decoración de las paredes: el negro, el gris oscuro o el azul marino son opciones atrevidas, pero que le darán un toque más sofisticado al espacio. Úsalos es espacios amplios y que estén bien iluminados y darás un toque de lujo.

¿Sabes que además puedes darle perspectiva al espacio?

La habitación se va a percibir de maneras distintas por algo más que el color y el estilo determinado que quieras darle al cuarto. Determinados colores y estampados te pueden servir en habitaciones pequeñas o con techos bajos. Por ejemplo, si pones un papel con un horizonte, un bosque, o una montaña, dará la sensación de profundidad. Tu habitación parecerá más amplia. Si, en cambio, tienes un cuarto pequeño, puedes usar un papel pintado con motivos geométricos o patrones que se repiten que dan sensación de orden y limpieza.

En lo últimos tiempos se ha puesto de moda también usar papel pintado en una sola pared. Esto te puede servir si te parece que el papel tiene demasiados elementos como para usarlo en las cuatro paredes y no quieres recargar más la habitación. Además, tendrás un foco de atención en el espacio y el resto de paredes equilibrarán el panorama.

El papel pintado puede combinar con la luz

Según la luz que tengas en la habitación, los papeles pintados dan también mucho juego. Por ejemplo, si has elegido papeles en tonos claros o pastel, sabrás que reflejan mejor la luz natural, así que tu cuarto parecerá más luminoso. Los puedes usar en habitaciones a las que no les dé tanto el sol para que sean más coquetas. Por el contrario, los papeles con colores oscuros absorben la luz que reciben y crean un ambiente más acogedor. 

Hay muchos elementos a considerar, pero el más importante es que elijas uno que además de gustarte, se ajuste a tu espacio. Con todos estos elementos, la psicología del color y la perspectiva, el papel pintado cumplirá con la función y el estilo que buscas.