El simulador de carreras que comprarían los mejores pilotos de F1
Con este "caprichito" podemos vivir el lujo de la Fórmula 1 sin salir de casa o, mejor dicho, de las alas de nuestra mansión.
Los límites están perimetrados por el dinero y en muchas ocasiones hay quien tiene tanto poder adquisitivo que las fronteras de la coherencia se dinamitan y dejan de existir. Por eso el lujo puede ser infinito y no tener límites. Para el común de los mortales muchas de las cosas por las que el mundo del lujo deambula son excesos inconcebibles. Pero el lujo también sirve para mejorar muchos aspectos de elementos que de otro modo no alcanzarían nunca tan altas cotas de excelencia. Como ejemplo, se ha presentado un simulador de carreras tan impresionante que podría dejar con la boca abierta hasta a los mismísimos conductores de un Fórmula 1.
Un accesorio de verdadero lujo
Prodrive es un simulador de carreras para el que no se ha escatimado ni un céntimo en construir un lugar de juegos único. Su diseño y sus líneas de construcción son abrumadoras. Es una verdadera pieza de coleccionista solo por su estructura.
Su función es la de ser un simulador de carreras único, de primerísima clase, pero además la forma en la que está elaborado hace de él una pieza de mobiliario para hogares exclusivos. No obstante ha sido creado por la casa de diseño de Ian Callum.
Se trata de un monocasco de carbono de una sola pieza encajado en un dosel de 16 capas de madera de haya que a su vez está lacado en negro brillante, como el mejor de los pianos.
El asiento del conductor está integrado de tal manera que la experiencia es sumamente inmersiva. Salvo por el olor a gasolina y el ambiente, cualquier piloto sentiría estar dentro de un coche de carreras.
Disputar una carrera desde el salón
El simulador de carreras Prodrive ha sido creado por ingenieros que han participado en la mayoría de pruebas de motor del mundo. De hecho, la experiencia en las disciplinas más importantes del automovilismo están reflejadas en este simulador único. Llevar las carreras al salón de quien pueda permitirse una pieza de ingeniería tan elaborada y creada con tanto mimo ahora es posible.
El diseño exterior es una maravilla pero cuando nos asomamos a su interior llama la atención por dos aspectos. El primero es su enorme pantalla de 49 pulgadas donde veremos nuestra partida con calidad 5K. Y el segundo se centra en el mando de juego, un volante que desprende diseño y funcionalidad a partes iguales.
De hecho, no tiene nada que envidiar a los que se usan en cualquier carrera profesional. Cuenta con con 5 diales giratorios, 12 botones pulsadores y paletas de fibra de carbono. Para completar la experiencia se incluyen los auriculares inalámbricos Beoplay HX de Bang & Olufsen. La cancelación de ruido permite centrar toda la atención en la carrera que estemos disputando.
La experiencia del simulador de carreras Prodrive
Prodrive es un simulador de carreras capaz de crear una experiencia de conducción única con una capacidad inmersiva absoluta. Toda la experiencia está relacionada con el lujo. Una vez pagadas las 49.000 libras que cuesta el capricho, sin incluir el IVA, ni posibles aranceles ni por supuesto gastos de envío, un equipo se desplazará a la casa del afortunado comprador para realizar la instalación de manera idónea.
Solo necesitarán el espacio necesario para depositarlo y un enchufe donde conectar el único cable con el que cuenta este Prodrive. Una vez conectado comienza la diversión y la inmersión total en el mundo de las carreras de coches.
Después de todo ese desembolso los interesados compradores deben saber que al menos el primer juego, el Assetto Corsa, viene instalado y listo para demostrar nuestras habilidades al volante.
