Dolce by Wyndham Sitges, una fábrica de luz
Luz y desconexión al cuadrado en un hotel que se parece bastante a un oasis de lujo en el Mediterráneo.
¿Estas intrigada por lo excéntrico del título? No hablo de un foco colgado del techo para iluminar, sino de un hotel ubicado en Sitges, un pueblo bañado 300 días al año por un sol radiante. En esta latitud encontré uno de mis últimos descubrimientos, Dolce by Wyndham Sitges, un lugar con una luz delicada y lenta que lo domina todo de una manera muy precisa.
Luz y desconexión con cinco estrellas
En un hotel cada uno cuenta su propia historia. De este a mí me maravillan el contraste, la metamorfosis de sus espacios en las diferentes horas del día, sus líneas de perspectiva… Esa mirada dirigida al horizonte que carece de límites, la imprevisibilidad del recorrido a las habitaciones, y que en todo momento haya esa gradación nítida con matices que te hacen perder poco a poco la noción del tiempo.
Dos palabras definen este fabuloso resort de cinco estrellas y son: luz y desconexión. Entrar en Dolce by Wyndham Sitges es empezar y acabar en un hotel que no ofrece la imagen típica del hall clásico. Tengo un plano mental de la distribución y en esta lectura horizontal que hago se despliegan un semicírculo articulando la zona de habitaciones junto a varias piezas rectangulares que son los servicios. Todas figuras geométricas puras dibujadas como un puzzle bien conectado, buscando una cierta idea de perfección.
Un lugar privilegiado en el entorno de Sitges
Hablamos de un hotel de grandes dimensiones con una superficie total de 24.500 metros cuadrados distribuidos en un edificio y múltiples espacios exteriores. Desde esta colina el hotel ofrece una línea de perspectiva con vistas panorámicas del mar y la comodidad de estar en las afueras, a cinco minutos del centro de Sitges con una única consigna: desconectar, relajarse.
La distribución en planta del complejo sorprende y acaba envolviéndote con su encanto creando un espacio mediterráneo natural y rodeado de la naturaleza del Parque Natural del Garraf muy cerca. Apenas 20 minutos en coche de Cala Morisca, una de las más emblemáticas de Sitges, fundirse con el entorno y disfrutar cada vez con un motivo distinto, pasar el día en uno de sus restaurantes o la noche en una de sus habitaciones.
Historia de Dolce by Wyndham Sitges
Dolce by Wyndham Sitges Barcelona fue construido en 2004, aunque forma parte de Dolce Hotels and Resorts desde 2015. Es propiedad de Wyndham Hotel Group LLC, la compañía hotelera más grande del mundo. Quince años después de su construcción en 2004 el hotel inició una reforma que finalizó en enero de 2020 tras una inversión de 15 millones de euros, con el objetivo de convertirse en un oasis de lujo con un concepto de hotel inmerso en un entorno natural único.
El proyecto de transformación fue realizado por el estudio Rose Ink Workshop, estudio afincado en Miami especializado en proyectos residenciales de lujo y hospitalidad, con Liubasha Rose como directora creativa. La reforma respondió a una remodelación del espacio interior con diferentes estilos dispuestos de manera cromática con motivos geométricos que resaltan y esbozan espacios extremadamente amplios con una colección de divanes, alfombras, librerías, mesitas bajas, pedestales, centenares de objetos con una amplia paleta de colores y texturas.
La reforma permitió transformar las 263 nuevas habitaciones (de las cuales 41 son suites) distribuidas en 6 plantas a través de un largo pasillo cuidadosamente diseñado que despliega a lado y lado todas habitaciones con espaciosas terrazas privadas.
Wellness para bordar una experiencia de lujo
Dolce Vital Spa es la zona Wellness donde desconectar, dejarte llevar y completar una experiencia de lujo. Se trata de un santuario con 7 cabinas de tratamiento, piscina interior climatizada, jacuzzi, sauna finlandesa, baño de vapor, fuente de hielo y numerosos masajes y tratamientos estéticos para los amantes del bienestar.
Además, el resort cuenta con cuatro piscinas exteriores y un Oasis Pool Bar donde disfrutar con camas balinesas, suelo de madera de cumarú y una carta gastronómica desenfadada en Deli Bar con mejores cafés de especialidad.
Gastronomía de altura
Y aquí llegamos a otra de las razones para visitar Dolce Sitges: la experiencia gastronómica en cualquier de sus restaurantes o bares. Para una cena romántica en una terraza panorámica con vistas al campo de golf el restaurante Terrassa La Punta con una carta que se basa en ingredientes de proximidad para persuadir a cualquier comensal. «La base de nuestra cocina es el respeto por el producto y por la tradición por innovar», afirma Jaume Balada, chef ejecutivo que cuenta con una sólida trayectoria profesional.
Al despertar bajar al Restaurant Verema donde tiene lugar el desayuno con una aventura gastronómica fresca y saludable que mira al mar a través de un extenso jardín. El Bar Malvasia también se ha reinventado para llevar la experiencia coctelera a otro nivel ofreciendo cóckteles de autor con una carta que ha sido creada por los expertos mixólogos del hotel acompañada con una selección de sugerentes tapas.
Los negocios también tienen cabida en Dolce by Windham Sitges
Tanto si viajas por placer como por negocios Dolce by Wyndham Sitges es uno de los hoteles más recomendables. Tiene más de 2.175 m2 con 26 salas de reuniones equipadas con lo último en tecnología en una situación privilegiada. Para una reunión de negocios, conferencias, congresos, seminarios, coloquios, conversaciones de pasillo y demás compromisos.
Es decir, para cualquier actividad multiforme que tenga que ver con un apretón de manos, no lo dudaría. Con la indudable ventaja del entorno justo al lado del campo de golf Terramar. Al frente el suizo Armando Waser como nuevo director general este 2022.
El silencio…
Puedes leer y releer, en domingos ociosos, pero no encontrarás muchos hoteles con un primer plano a un club de Golf y un imperturbable silencio. Reconozco sin reparos que este es, curiosamente, uno de mis hoteles favoritos (aunque sin olvidar este otro). Así que antes de irme hago una última fotografía. En ella aparece un rectángulo delimitado por el que se desliza un espacioso vestíbulo exterior impecablemente ordenado que conquista a los invitados al llegar.
Lo sé, soy poco explícita, lo que te permite creerme o visitarlo y ver de qué te estoy hablando exactamente. Mi intuición me habló de ello, enseguida, cuando puse el primer pie en este refugio inverosímil y vi aquella luz sencillamente magnífica.