(Foto: Vestige Collection)
Un palacio en ruinas en el norte de España fue la primera piedra de Vestige Collection, la nueva cadena hotelera española que quiere convertirse en el Paradores del siglo XXI. La recuperación del patrimonio arquitectónico para transformarlo en una experiencia turística de lujo es el pilar de este proyecto que, además, quiere ser “custodio” del legado histórico-cultural de nuestro país.
Asturias, con la rehabilitación del Palacio de Figueras, es el punto de partida. Es la región en la que se ha inaugurado la primera propiedad de Vestige, que tendrá uso de estate privado. Una fortaleza de más de 500 años que se abre al Cantábrico y que ha necesitado más de 11 años de rehabilitación.
A partir de ahí, sus propietarios, con el fundador el Grupo QuirónSalud, Víctor Madera, a la cabeza, desataron su pasión por la recuperación y rehabilitación de patrimonio histórico y cultural. Algo que ha culminado en una pequeña selección de retiros de lujo para los viajeros más exigentes.
Se trata de 25 propiedades excepcionales, muchas de ellas consideradas Bienes de Interés Cultural, a las que intentan dar una nueva vida. Doce de ellas se presentan en formato hotel y trece en formato estate privado. Están ubicados en destinos excepcionales, recónditos y especiales de Asturias, Baleares, Extremadura, Galicia, País Vasco y Madrid.
El asturiano Palacio de Figueras ha sido el primer establecimiento de Vestige en inaugurarse. Después llegará el hotel Son Vell en Ciutadella (Menorca). Una finca de más de 180 hectáreas, llenas de rincones naturales, con evocaciones a Venecia y que cuenta con 34 habitaciones, distribuidas entre la casa principal, los antiguos graneros y anexos restaurados.
También en Menorca, abrirá Santa Ana, una encantadora casa de campo que tendrá uso de estate privado. De hecho, en los próximos dos años ampliará su presencia en Baleares con la apertura de 3 nuevas propiedades. Dos de ellas en Mallorca (un hotel y un private state) y un nuevo hotel en Menorca, así como en Asturias, con un nuevo private state.
El resto de propiedades, que se encuentran en diferentes fases de restauración, se irán incorporando al portfolio de Vestige Collection conforme vayan terminando los trabajos de modernización. Siempre se respetan la autenticidad de los edificios para adaptarlos de manera armoniosa a un turismo más contemporáneo y sofisticado.
Para cada una de las propiedades se realiza un proyecto propio de rehabilitación histórico y arquitectónico. Requiere entre 5 y 8 años y en ellos participan equipos multidisciplinares conformados por historiadores, arquitectos o paisajistas, para transformar ruinas históricas en palacios de lujo.
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