A veces, las subastas, desvelan los secretos de piezas realmente llamativas. Es el caso de la última subasta celebrada ayer por Christie´s en Nueva York de un espectacular brazalete que perteneció a la actriz Marlene Dietrich. Una pieza de diamantes y rubíes firmada por la casa de alta joyería Van Cleef & Arpels bautizada como ‘Jarretière‘ y que ha sido catalogada como «una de las joyas más importantes de todos los tiempos».
Sin duda, uno de los motivos de esta afirmación ha sido su precio alcanzado en la puja. La nada desdeñable cantidad de 4,527 millones de dólares con la que se han superado las estimaciones de la casa de subastas. La otra, por supuesto, su increíble historia.
Marlene Dietrich trabajó en la primera década del siglo XX bajo las órdenes de algunos de los directores más míticos de la historia del cine como Billy Wilder o Alfred Hitchcock. Además, hizo buenas relaciones con iconos del lujo como Christian Dior o Louis Arpels, con quien forjó una estrecha amistad.
Y fue con él precisamente con quien surgiría la idea de crear lo que desde Christie´s catalogan como «una de las piezas de joyería más extraordinarias jamás realizadas». Se trata, cómo no, del brazalete de rubíes y diamantes que la actriz lució por primera vez en Stage Fright, un thriller de 1950 dirigido por Hitchcock, el maestro del terror.
La pieza fue elaborada unos años antes, en 1937, por los expertos joyeros de Van Cleef & Arpels. Pensada para lucir en el puño, está compuesta por cientos de rubíes de forma ovalada, diamantes redondos, cuadrados y de talla baguette. Todos engastados en platino.
Se dice que era una de las joyas favoritas de la actriz y la única joya que conservó durante toda su vida. Además de en la gran pantalla se la puso para presentar el premio a la mejor película extranjera durante los Premios de la Academia de 1951.
El brazalete de Marlene Dietrich se ha subastado junto a otras 30 piezas de la colección personal de joyería de Anne Eisenhower. La diseñadora neoyorkina fallecida el año pasado se hizo con la joya durante una subasta en 1992. Después, mandó hacer a la firma francesa los pendientes y el collar a juego que también se subastaron ayer por 176.400 y 1.184.400 dólares respectivamente.
Además del gusto por las joyas y una debilidad manifiesta por las diseñadas por Van Cleef & Arpels, ambas mujeres compartían también un gran patriotismo. Mientras el abuelo de Anne, el presidente Dwight D. Eisenhower, lideró la invasión contra los nazis durante la II Guerra Mundial; la actriz fue una acérrima defensora del esfuerzo bélico de los Estados Unidos. De hecho llegó a ser reconocida en 1947 con la Medalla de la Libertad del gobierno de los Estados Unidos y la Legión de Honor del gobierno francés.
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