La camisa blanca, una prenda imprescindible en el armario masculino
Si no sabes qué ponerte y tampoco eres muy bueno combinando colores, la camisa blanca es, sin duda, tu mejor aliado.
No hay una prenda más combinable que la camisa blanca. Es sencilla a la vez que elegante. Cómoda a la vez que versátil. Y por ello, no deben faltar una par de ellas, como poco, en el armario de todo hombre. Adaptable a cualquier estilo y edad. Es un básico que te saca de muchos apuros. Un comodín valido para looks formales, casual, sport e incluso, gala.
La camisa blanca, un básico que te salva de cualquier apuro
No existe una prenda igual a la camisa blanca. Te recomiendo que tengas varios modelos de cuello, hechuras y estilos. Te salvarán de muchas situaciones embarazosas cuando no sepas que ponerte. Además, si eres de los que tienen problemas para combinar colores, estampados o modelos, con este color estarás a salvo.
Durante el otoño/invierno, y en ambientes laborales, puedes usarla con traje. Te resultará muy versátil y, además, combina con cualquier color. Por el día puedes llevarla con trajes claros, y por la noche, con colores oscuros. Con la camisa blanca, la corbata, que siempre es motivo de controversia, dejará de ser problema.
La prenda perfecta para looks elegantes y casual
Para los fines de semana, este tipo de prenda es el complemento ideal. La podrás usar en looks de ocio, para ir a la montaña o en una escapada romántica. Además, si eres de tez morena, el color blanco favorece muchísimo. Y es que pocas veces tenemos en cuenta nuestro tono de piel a la hora de vestir, pero a partir de ahora tampoco será problema.
También es una prenda con un espíritu muy deportivo. Unos vaqueros y un mocasín te darán un aire muy sport. En verano, los polos y camisetas en color blanco son un must. Además, el fondo blanco da pie a muchas combinaciones de impresiones digitales.