Penélope Cruz ha sido la gran protagonista del fin de semana por su look en la inauguración del Nita Mukesh Ambani Cultural Centre de Mumbai, en India. Estos días el país asiático es el centro de la moda mundial por acoger el desfile de la colección Pre-fall de Dior y se ha llenado de estrellas entre las que ha destacado la española.
Su vestido rosa palo con capa y plumas ha sido el culpable de que hoy en todas partes de hable del gusto y la elegancia de la actriz. Un buen hacer sobre la alfombra roja que no solo es mérito de Penélope Cruz, sino también de Tamara Ralph, la diseñadora australiana en la que confió Meghan Markle.
Para su gran aparición en la India, Penélope Cruz renunció a Chanel y se decantó por un espectacular diseño de Alta Costura. Un vestido de escote asimétrico con detalles de pliegues frontales y una llamativa abertura en la falda que destacaba por llevar incorporada una elegante capa de tul semitransparante. Esta recorría todo el vestido y sus bordes estaban decorados con miles de plumas. Una obra de arte hecha vestido que firma la diseñadora Tamara Ralph con su marca homónima.
Muchos asociarán el nombre de Tamara Ralph a Ralph & Russo, la firma que la diseñadora fundó en 2007 junto a su socio Michael Russo. Esta marca, que nació en Londres y con tan solo una clienta, acabó convirtiéndose gracias al boca a boca en una de la firmas más famosas del mundo. En 2014 fue la primera firma británica en desfilar en la Semana de la Moda de París y Tamara Ralph se convirtió en la primera australiana en conseguirlo.
Bajo el título de Ralph & Russo la diseñadora vistió a celebrities de la talla de Bella Hadid, Angelina Jolie, Ana de Armas o Penélope Cruz. Aunque si por algo es recordada, es por haber sido una de las primeras en vestir a Meghan Markle.
La duquesa de Sussex se decantó por uno de los vestidos de la marca para posar en las fotografías con las que anunció su compromiso con el príncipe Harry. Nos referimos al vestido negro, largo hasta los pies, que se caracterizaba por tener una voluminosa falda de volantes de tul y un cuerpo transparente con detalles vegetales bordados en dorado.
Tal fue el revuelo que originó la elección de Meghan Markle por la firma, que muchos la señalaron como la elegida por la duquesa para su vestido de novia.
Sin embargo, y tras años de éxitos en todo el mundo, la firma entró en concurso de acreedores en marzo de 2021. Fue adquirida por la compañía estadounidense Retail Ecommerce Ventures, bajo condición de que Tamara Ralph y Michael Russo no ejercieran ninguna función ni creativa ni de gestión en la firma.
Fue entonces cuando la diseñadora decidió lazar su propia firma con su nombre. Una marca que se ha vuelto a convertir en un éxito y que tiene en Penélope Cruz a su nueva musa.
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