Los tejidos inteligentes son textiles que incorporan componentes electrónicos y tecnologías avanzadas para interactuar con su entorno y proporcionar beneficios adicionales a los usuarios.
Estos tejidos pueden incluir sensores, actuadores, microcontroladores y otros dispositivos electrónicos integrados de manera imperceptible y están revolucionando el mundo de la moda.
De hecho, las innovaciones llegan día tras día ya que es un campo inexplorado que ofrece posibilidades infinitas. Así, los investigadores trabajan para crear soluciones en todos los ámbitos, para dotar a las prendas de vestir de nuevas funcionalidades.
Un ejemplo es descubrimiento de los investigadores del Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins. Han presentado un innovador desarrollo que permite la creación de fibras textiles que tienen la capacidad de recolectar y almacenar energía eléctrica.
El equipo de científicos ha ideado un método para la producción de baterías de fibra descrito en un estudio publicado el 22 de mayo en Advanced Materials Technologies. En lugar de usar equipos textiles convencionales, han personalizado equipos de baterías para alcanzar el grosor necesario.
En un segundo estudio publicado el mismo día en Advanced Functional Materials, el equipo de APL se enfocó en fabricar fibras escalables y de alto rendimiento. Son capaces de captar la luz y convertirla en electricidad inspirados en la tecnología de células solares convencionales.
También, un grupo de científicos asiáticos desarrolló una fibra capaz de recibir y transmitir señales eléctricas de forma inalámbrica, sin necesidad de estar conectada a ninguna batería ni chip.
Se trata de una especie de hilo que puede incorporarse a las piezas de ropa. Este incluye en su interior todos los componentes electrónicos necesarios para funcionar, usando al cuerpo como parte del circuito.
De hecho, es tan parecido al hilo que usa habitualmente la industria textil, que puede someterse sin perder propiedades a los procesos industriales de fabricación de ropa y es lavable.
Además, al aplicar presión sobre ella, la fibra emite señales eléctricas que se pueden detectar a una distancia de 30 metros. Esto permite el control táctil y remoto de dispositivos electrónicos, lo que abre la puerta a innumerables aplicaciones.
Pero el desarrollo de este tipo de textiles está aun lejos de llegar al gran público, aunque sí existen tecnologías ya implementadas a las prendas de vestir. Es el caso de Sepiia, una firma con sede en Madrid que crea ropa que no se arruga y no se mancha, pero te refresca en los meses de calor.
De hecho, la compañía dispone de diferentes tipos de textiles y en estas fechas el tejido refrescante destaca sobre los demás. Está formado por minerales que ofrecen frescura constante y elimina el sudor. Junto a ello, ha desarrollado una tecnología de secado muy rápido con el fin de que las prendas se puedan utilizar inmediatamente después de lavarlas.
Pero lo más de lo más está pensado para los aficionados a los videojuegos. Son textiles inteligentes basados en técnicas de gamificación del proyecto Gamify del Centro de Investigación e Innovación Aitex.
Son inventos que van desde un guante sensorizado que, en un videojuego de realidad virtual, permite al usuario disparar un cañón láser y sentir la vibración o el retroceso, hasta camisetas conectadas que permiten al deportista entrenar en casa y saber si hace bien un ejercicio.
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