5 consejos para hacer ejercicio y tener la piel perfecta
Hacer ejercicio y cuidar la piel al mismo tiempo es muy fácil si se siguen unas sencillas pautas beneficiosas también para el organismo.
Hacer ejercicio a diario es muy beneficioso para el cuerpo y también para la mente. Por eso es importante practicarlo de una forma adecuada, teniendo en cuenta nuestras posibilidades y también los factores externos como la temperatura o el lugar donde lo practiquemos. Y es que la piel sufre las consecuencias de todos nuestros actos y es fundamental tenerla en cuenta para tenerla siempre perfecta.
1. Limpiar la piel
Debemos asegurarnos de que nuestra la piel esté lo más limpia posible antes de hacer ejercicio. De esta manera será más sencillo eliminar las impurezas a través de los poros.
2. Protector solar
A estas alturas de la película nadie duda de la importancia de este punto por los riesgos que tiene el sol para la piel. Además, una exposición prolongada a la luz solar y sin la protección adecuada, acentúa el envejecimiento prematuro.
3. Evitar las horas de mayor radiación solar
Hay que reducir la actividad física y, en general, la exposición solar entre las 12:00 y las 16:00 horas en verano. Son las horas en las que la radiación UV es más intensa y por lo tanto, las más peligrosas para la piel.
4. Usar ropa adecuada
La ropa deportiva tiene que ser cómoda, por lo que debemos estar seguros de que no nos creará rozaduras. Así pues, es recomendable elegir ropa holgada, que deje transpirar y que proteja del sol en verano. En esta época del año es mejor elegirla de colores claros y quitársela tras hacer ejercicio para eliminar las impurezas y la humedad que produce el sudor.
5. La hidratación
Hidratarse antes, durante y después de hacer ejercicio es fundamental. El cuerpo pierde aproximadamente medio libro de agua a través de la piel cuando hacemos deporte, por lo que es indispensable nutrirlo y reponer los líquidos perdidos. Una vez terminada la sesión de ejercicio, hay que reponer la hidratación de nuestra piel y cuidar especialmente las zonas que más han sufrido. Es importante ducharse lo antes posible para limpiar la piel e hidratar muy bien las áreas expuestas al sol o las que hayan estado en contacto con la ropa y se hayan irritado.