Scalpers, un valor en alza

Scalpers ha sabido ganarse un hueco en el panorama del Retail Moda Internacional a base de esfuerzo y planificación. Una aventura empresarial que comenzó de la mano de sus fundadores, Rafael Medina, Alberto Artacho y Borja Vázquez con un ADN claro: hacer moda de hombre y niño atemporal con cuidada creación y acabados. Así, además de haber experimentado un crecimiento económico sostenido y veloz, puede presumir de ser una de las compañías españolas del Retail Moda que ha fulminado récords de crecimiento durante los tres últimos ejercicios.

Scalpers comenzó creciendo en España en el año 2007, cuando el país vivía la mayor crisis económica del sector. Desde el principio supo encontrar su hueco en un mercado altamente competitivo posicionando sus atractivos productos de moda en el sector de gama media-alta y apostando por puntos de venta altamente rentables. Así lo avalan sus números.

El año pasado, la firma abandonó el canal multimarca para centrarse en las tiendas propias que ya son 30 en nuestro país, las tres últimas situadas en A Coruña, Salamanca y Santander. Su modelo responde a locales ubicados en las mejores calles de España, con superficies entre los 100m2 y los 160 m2 cuyo reclamo principal es el producto presentado en atractivos escaparates. Sirvan como ejemplo los caso de las últimas tiendas. En capital coruñesa y asesorada por la consultora Aguirre Newman, Scalpers acaba de abrir en el número 2 de la calle Betanzos, eje próximoo a todas las tiendas del grupo Inditex; en Salamanca buscó la localización en la calle Toro, punto primordial de la moda en la ciudad; mientras que en Santander se ubica en el número 3 de la calle Jesús de Monasterio, también en pleno centro.

El resto de tiendas de la marca están repartidas por la geografía española en ciudades como Sevilla, Madrid, Zaragoza, Valencia, Bilbao, Gijón o Barcelona. Además, concentra su distribución en corners de El Corte Inglés y su tienda online que, por cierto, funciona muy bien.

El otro gran secreto de la marca es que ha sabido crecer velozmente tanto en España como a nivel internacional. Atentos a este dato: desde el año 2010, la firma ha multiplicado por siete su tamaño de red de tiendas y facturación siendo desde su nacimiento en 2007 un auténtico ejemplo de superación en el mercado nacional e internacional. Así, cerró el ejercicio 2010 con una facturación de más de 4,5 millones de euros, dando un salto especialmente señalado entre los años 2013- 2015, cuando creció una media del 65% anualizado. En 2011 la compañía vivió uno de sus mayores crecimientos elevando su cifra de facturación hasta un 33,6% y cerrando el año con 6 millones de euros, una cifra que mantuvo estable hasta 2013, cuando consiguió mayor fama.

La empresa demostraba entonces que “querer es poder», no sin riesgos. En 2014 supo arriesgar acertadamente finalizando una ampliación de capital en marcha de 1,2 millones de euros que pretendía avalar su crecimiento fuera de nuestro país y conllevó la entrada de nuevos socios. A los fundadores se sumaron entonces el empresario Jaime Bergel, director en España del fondo HIG, y el grupo venezolano Phoenix World Trade, propietario de la red de tiendas de Zara en Venezuela. Esto sirvió para operar fuera de España con confianza y mayor seguridad.

Ese año 2014 se cerró alcanzando los 12 millones de euros de facturación con un crecimiento del 66,6% respecto al año anterior; y 2015 fue aún mejor, ya que alcanzó el 70% de crecimiento con una facturación global de 19,5 millones de euros. Casi nada. El año 2016 los números siguieron mejorando con 31,5 millones de euros de facturación, más de 300 empleados y cerca de 90 tiendas.   

En cuanto a localizaciones, fuera de España Scalpers opera en México, Portugal, Francia, Chile, Países Bajos, Reino Unido, Bélgica y Latinoamérica. A destacar los corners con los que cuenta en París, en Galerías Lafayette, y su intención de dar el salto en breve a ciudades como Burdeos o Lyon. Latinoamérica es otro punto fuerte de expansión para la marca. El grupo desembarcó en el mercado chileno a principios de 2016 donde cuenta con un establecimiento de sesenta metros cuadrados en el centro comercial ‘Casa Costanera’ de la capital del país. La compañía prepara la apertura de nuevas tiendas monomarca en la región, al tiempo que impulsa su red de distribución de corners, para lo que ha firmado un acuerdo con Falabella.

Además, la compañía se encuentra analizando la posibilidad de dar el salto a Colombia, Argentina y Uruguay para este año, prepara la apertura de su segunda tienda en Jordania y se encuentra en  fase de negociaciones con un gran grupo de distribución árabe para expandirse en Oriente Medio.

El verdadero éxito de esta empresa es haber creado una marca fiel a su posicionamiento en el mercado. Dar con la diana de los gustos del consumidor y mantener su fe ciega en el proyecto inicial han servido para facturar más y mejor. También correr riesgos en épocas difíciles ha dado el fruto deseado desde sus comienzos. Ahora toca mantenerse y seguir creciendo, que no es poco.

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