Isabel II vende su propio vino para brindar en Navidad

Por segundo año consecutivo y por el mismo motivo, Isabel II no acudirá a su residencia de Sandringham para descansar durante la semana de Navidad y Fin de Año. Algo que no evita que los jardines y la residencia sean uno de los lugares más frecuentados por turistas extranjeros y británicos. Aquellos que tienen la fortuna de acercarse a este lugar, ubicado en el condado de Norfolk, a unos 160 kilómetros al norte de Londres, suelen visitar la tienda oficial.

En ella se suelen vender los típicos recuerdos ligados a la imagen de la Familia Real. Pero también algunos productos elaborados con las materias primas que salen de las 4.000 hectáreas de terreno cercano. A la venta desde hace un tiempo está una ginebra que se elabora en una destilería de la finca. Y más recientemente se lanzó la primera cerveza. Se elabora con cebada orgánica Laureate Spring Barley que se cosecha en los jardines de Sandringham y agua cristalina extraída de un pozo cercano.

Para completar la oferta se ha agregado en los últimos días un vino, aunque curiosamente no se produce en los terrenos de Sandringham. Se trata de un llamado «Prosecco vintage» que se vende en la tienda en pequeñas botellas de 200 ml. Lo justo para brindar. las botellas están decoradas con una etiqueta festiva que incluye un pequeño petirrojo, acebo y abetos. Cuestan unas 15 libras cada una. El vino se elabora en Italia por encargo de la tienda.

Desde los recientes problemas de salud, los médicos han recomendado a Isabel II que reduzca al mínimo su contacto con el alcohol. Aunque rara vez se la ha visto beber en público, se dice que es una gran conocedora de los grandes vinos. Y que solía beber a diario una copa de vino dulce con la cena. Al igual que su hijo, el príncipe Carlos, Isabel II tiene en el Martini seco una de sus bebidas favoritas.