Pierce Brosnan pone a la venta por 100 millones su mansión inspirada en las películas de 007

Sabemos que Malibú es un lugar muy apreciado por los famosos. Y es que estar cerca del trabajo es una de las principales reglas del confort, así aprovechamos mejor nuestro tiempo libre. Además, si tu trabajo es la gran pantalla, laboras en el mismísimo Hollywood y te llamas Pierce Brosnan, lo mejor que puedes hacer es buscar un pedacito de tierra con derecho a agua salada y construir allí tu vivienda. Una generosa casa a la que acudir después de salvar al mundo.

Esto debió pensar el artista mientras rodaba la película El mañana nunca muere, en la que interpretaba al mítico James Bond, hace más de 20 años. Así que aprovechó una parcelita pegada al Pacífico, a cuarenta y nueve minutos en coche de la meca del cine, y Pierce Brosnan encargó a dos arquitectos llamados Ralph y Ross Anderson, que ejecutaran una magnífica mansión con todo lo que su esposa Keely Brosnan y el resto de familiares y amistades necesitaran.

La espectacular mansión del 007 Pierce Brosnan

Debe ser por la temática de la película, que Brosnan se decantó por un estilo asiático para su futuro inmueble. Como buenos profesionales, los Anderson crearon una magnífica mansión digna del mejor decorado para una peli de acción circunscrita en Tailandia. Un perfecto lugar para vivir si amas al 007 más popular, pero también si no lo has oído nombrar en tu vida.

La vivienda fue construida por la empresa Albino Construction, que le dio vida a casi 1.200 metros cuadrados de superficie. Aunque no sabemos los pormenores, sí conocemos que varios medios estadounidenses han divulgado que la obra duró una década. ¿Será por mala praxis o por diferencias de criterio? En fin, el caso es que la propiedad posee unos 37 metros de costa en la que pasear, disfrutar de un buen día de playa, leer un libro frente al océano o, simplemente, disfrutar de una fogata en buena compañía.

La mansión de Pierce Brosnan está a la venta por 100 millones de dólares

Este 2020 Pierce ha decidido poner en venta esta maxi-propiedad, por la suculenta suma de 100 millones de dólares, 85,36 de euros. Un coste que la convierte en la octava propiedad más cara de Los Ángeles. El inmueble fue bautizado por el nombre de Orchid House, casa de las orquídeas, debido a la proliferación de estas flores por la parcela. Sin embargo, tampoco es nada desdeñable la presencia de palmeras y gardenias, pero, obviamente, era muy latoso denominarla Orchids, palm trees and gardenias House.

Desde el aire podemos ver que la mansión de Pierce Brosnan tiene forma de J invertida, con una pequeña casa de invitados frente al palito más bajo. Debajo de la J nos encontramos una extensión de terreno ajardinado, un pedacito de playa y una amplia zona de disfrute al aire libre, con barbacoa, comedor, chimenea exterior y hasta un Chill Out con mucho pedigrí. Detrás de este, frente al mar, una piscina de agua salada con cascada entre el edificio principal y el de huéspedes.

Una casa de estilo asiático con la madera teca como protagonista

Las cubiertas a dos aguas están terminadas con tejas de arcilla verde, lo cual permite una simbiosis con el verde del exterior, a la vez que rememora las construcciones asiáticas. Algo que recuerda también a Asia es el uso de madera en casi todos los paramentos, desde las vigas de tijera, llamadas así por su peculiar forma en la que se cruzan. Pasando por la puerta principal de madera de teca tallada, proveniente de Tailandia; hasta el pavimento de madera, también de teca, de anchos tablones.

La teca es una madera de origen asiático, pero que actualmente se comercializa desde plantaciones en África y América Latina. Allí su crecimiento es mayor y, por lo tanto, reduce sus tiempos de corta y aumenta su producción. Sus excelentes propiedades de durabilidad y trabajabilidad la hacen muy preciada, además, posee una resina natural que repele a las termitas y hongos. Es muy utilizada en el sector naval y es ideal para elementos que vayan a estar a la intemperie.

Una habitación principal de 370 metros cuadrados

La casa posee una sala de estar con vistas al mar, previo paso de las terrazas mentadas, una cocina gourmet de mármol con amplios ventanales y comunicación con el exterior mediante puertas correderas de piso a techo, y un generoso comedor. A la planta superior, una escalera de teca conduce a una increíble suite principal de 370 metros cuadrados ¡¡Sí!! ¡Has leído bien!, una cantidad de metros que permite balcón privado, dos vestidores, dos baños y un estudio de arte.

Otros cuatro dormitorios completan la vivienda, contando con la casa de invitados, que dispone con la friolera de catorce baños y siete chimeneas, que se reparten por todo el complejo. Pero esto, como podrás imaginar, no es todo. En la planta baja se ubica un teatro de última generación, con capacidad para 20 personas, una bodega para proveerse de unas 200 botellas del mejor vino, dos bares, un gimnasio, una sala de música y un spa de lujo con dos bañeras.

Una casa de película

Por poner una pega, se podría argumentar que, teniendo una parcela de 4.050 metros cuadrados de superficie, las dos plazas de garaje del complejo son insuficientes, aún más cuando tienes invitados, como los residentes de la casa de huéspedes. Por el contrario, se puede sostener que es un gran acierto haber preparado un comedor exterior protegido por mamparas de cristal, permitiendo placenteros y enriquecedores almuerzos o cenas.

Desde medios estadounidenses también nos llega que la financiación de la majestuosa mansión de Pierce Brosnan fue gracias a otra de las películas de Bond: Muere otro día. Este filme recaudó unos 432 millones de dólares, y permitió al actor un generoso ingreso extra. Así que si os gusta la vivienda, tenéis dos opciones, soltar los 85 millones o hacer el negocio del siglo y construir una. En cualquiera de los dos casos ¡¡Mucha suerte!!