Maxwell School, así es el colegio británico que piensa en los alumnos
Visitamos Maxwell School de la mano de su fundadora y descubrimos una forma de enseñar muy personalizada.
Recorro la calle Serrano y llego a Maxwell School justo antes de que suene el timbre. En el patio me encuentro con niños de 11 años que me saludan en un inglés. Al fondo, los mayores, estudiantes de bachillerto sentados en corro que pasan del inglés al castellano entre bromas y risas.
De camino al despacho de Linda Barbour, fundadora de Maxwell School, intento adivinar a cuántas nacionalidades dan cabida estas paredes. “Entre 15 y 20”, me responde ella. “Niños de padres españoles, con un padre extranjero y el otro español, los dos de fuera… ¡tenemos de todo!”.
The Luxonomist: Linda, ¿cómo nace Maxwell School?
Linda Barbour: Maxwell School es el resultado de un proyecto educativo que se inició en 2008 con Proed. Era un centro de apoyo educacional que daba ayuda extraescolar a alumnos que tenían problemas en su educación y a jóvenes que querían mejorar sus notas. Durante los años de Proed nos dimos cuenta de que la mayoría de nuestros alumnos estaban descontentos con sus colegios y buscaban una alternativa. En 2015 decidimos fundar Maxwell School, un proyecto con una forma de educar y aprender diferente.
Una enseñanza basada en el currículum británico
TL: ¿Cómo entendéis la enseñanza?
LB: La enseñanza de Maxwell School se basa en el curriculum británico y es bilingüe. Nuestro modelo se centra en el alumno; las clases tienen como máximo quince alumnos, lo que nos permite dar una atención muy personalizada. Nuestro modelo de educación se basa, además, en proyectos transversales que dan sentido y significado al aprendizaje. Proyectos que, sobre todo, son divertidos, variables y animan al alumnado.
TL: ¿Qué os distingue de otros centros educativos?
LB: En Maxwell sabemos que cada niño es único y así les enseñamos. Evaluamos a cada alumno que entra en el colegio para poder entender sus destrezas y dificultades. Conociéndoles, podemos hacer que accedan al currículum a través de sus destrezas y luego utilizarlas para apoyar sus dificultades. De esta manera potencian sus debilidades, convirtiéndolas también en fortalezas.
TL: El bilingüismo es un valor cada día más buscado en educación, ¿cómo lo entendéis en Maxwell School?
LB: El bilingüismo es esencial hoy en día. El inglés y el español dan acceso a los alumnos al mundo entero. Por lo tanto, creemos que es muy importante ofrecer un bilingüismo de calidad. Para ello, en Maxwell apostamos por profesores nativos muy formados. En nuestro equipo contamos con profesores de Inglaterra, Estados Unidos, Irlanda o España, y muchos de ellos, además de carreras, poseen másteres universitarios.
El objetivo: sacar lo mejor de cada alumno
TL: Los profesores son la clave para conectar con el alumno y sacar lo mejor de él, ¿como es vuestro equipo?
LB: Los profesores, efectivamente, son la clave para conectar con los alumnos y sacar lo mejor de ellos. Como he mencionado antes, contamos con un equipo muy preparado y con mucha experiencia. Profesores, además, muy flexibles que son capaces de adaptar su manera de enseñar al nivel de habilidad de cada niño.
TL: ¿Cómo preparáis a los alumnos para un futuro cambiante?
LB: No sabemos cómo será el mundo laboral en el que vivirán nuestros alumnos, pero sea como sea, tenemos que ser capaces de darles las herramientas necesarias para hacerle frente.
En Maxwell School creemos que estas herramientas no se encuentran en las viejas formas de enseñar (memorización, repetición de datos… ), sino en poder comunicarse a través de debates, en la creación de proyectos propios, actuar en escenarios, investigar y experimentar el fracaso, que en realidad es un aprendizaje.
Con esas herramientas conseguimos que los niños saquen de sí mismos su propia excelencia académica, una excelencia académica que viene desde dentro y que les empodera para arriesgarse y hacer cosas nuevas.
La digitalización, la clave del futuro
TL: ¿Qué se llevarán los alumnos de Maxwell School?
LB: Los padres siempre me preguntan qué es lo que yo deseo que los niños se lleven de Maxwell School cuando acaban sus estudios. Mi respuesta es siempre la misma: quiero que se lleven felicidad, confianza e independencia. Con estos tres atributos estoy segura de que triunfarán en lo que hagan.
TL: La digitalización forma parte de ese futuro del que hablábamos, ¿cómo abordáis este tema en Maxwell School?
LB: En Maxwell School reconocemos que la digitalización es el futuro. Es como hace dos mil años, cuando se entendió que la escritura había llegado para quedarse. Y hay que tomar esto en serio, porque la persona que no sea nativa digital no conseguirá trabajo. Por supuesto, esto no quiere decir que dejemos atrás las otras formas de enseñanza.
TL: ¿Como lo hacéis?
LB: Cada asignatura conlleva su parte de texto, su parte de escritura y su parte de informática. En Maxwell School cada alumno recibe un Chromebook que le acompañará durante todo el año escolar como una herramienta más, y tiene que aprender a utilizarlo como justamente esto, una herramienta. Por esa razón exigimos que lean libros, tengan libros de texto… y también exigimos que escriban, con lápiz y bolígrafo. Ellos tienen que poder discernir entre el uso adecuado y no adecuado de la informática.
TL: Por último, Linda, como madre, ¿qué buscarías en un colegio?
LB: La respuesta a esta pregunta ya me la hicieron mis hijos cuando me preguntaron en su momento por qué no empecé Maxwell School antes para que ellos hubieran podido estudiar aquí.