El gran desarrollo económico y social que está viviendo Colombia durante los últimos años, debido principalmente a sus acertadas políticas y a su participación en la Alianza del Pacífico, está convirtiendo al país en todo un referente para el mercado del lujo en LATAM siendo por un lado un país atractivo para las grandes marcas de lujo, y por el otro un exportador de marcas premium excelentes.
Dado el crecimiento de la clase media y alta debido al auge de su industria, se estima que en torno al 4% de la población tiene ingresos anuales superiores a los US$250.000. Aunque no existe la misma proporción de posibles consumidores como la de los países más desarrollados, el gran éxito de marcas como Cartier o Bulgari ha facilitando la entrada de otras marcas como Burberry, Tiffany’s y Louis Vuitton.
Las consultoras Wealth-X y UBS cifran en 635 los UHNWI’s que hay en Colombia –personas cuya fortuna individual es igual o superior a 30 millones de dólares– cifra que ha ido en constante aumento gracias a que Colombia pasó de un PIB (Producto Interno Bruto) anual de 100.000 millones de dólares en el año 2000 a superar los 380.000 millones de dólares en la actualidad, lo que se traduce en un incremento del PIB per cápita de 2.000 a 8.000 dólares anuales.
Los grandes recortes en materia arancelaria y los acuerdos bilaterales con Europa, y en concreto con España, le han supuesto a Colombia un puesto privilegiado en las opciones de inversión de las grandes marcas de lujo, como explicaba en una entrevista el director de mercadeo y relaciones públicas de Ferrari en Colombia, Steven Goldstein.
En el sentido contrario, el mercado de la moda en Colombia ha logrado exportar grandes marcas como Nancy González quien junto a su hijo Santiago González han conquistado con gran éxito el mercado neoyorkino, con sus bolsos de piel de cocodrilo.
O también tenemos el caso de Silvia Tcherassi, diseñadora de moda prêt à porter y novias, quien recientemente acaba de instalarse en Madrid en la calle Lagasca, 88, justo al lado de Chanel y al frente de Balenciaga entre otros vecinos ilustres. Silvia cuenta ya con una importante presencia no sólo en Colombia, sino además en México y EEUU.
Camilo Guerrero Villegas, experto consultor de moda colombiano radicado en Madrid, a quien hemos consultado, nos cuenta: “El consumidor de lujo que hay hoy en día en Colombia es exigente, se mantiene informado acerca del mercado del lujo en Europa y en el mundo entero, y tiene la posibilidad de viajar y disfrutar del turismo de lujo que le ofrecen los mercados internacionales”. Estos datos no hacen más que confirmar la excelente salud que goza el mercado colombiano y la tendencia de crecimiento que experimentará en los próximos años.
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