Pagan más de medio millón de dólares por una guitarra que destrozó Kurt Cobain

Inservible y sin arreglo posible pero con un enorme valor sentimental. Una guitarra que un día perteneció al líder de Nirvana, Kurt Cobain, acaba de ser subastada por un cantidad casi millonaria.

El precio final alcanzado por este pedazo de historia de la música ha sorprendido gratamente a la casa de subastas. Julien’s Auctions la había incluido dentro de una venta especial de objetos musicales, pero no era ni mucho menos el más relevante.

La subasta de artículos musicales de Julien´s Auctions

En la subasta había guitarras mucho más atractivas y en funcionamiento. De hecho, la de Bono de U2 o la de Eddie Van Halen han tenido menos tirón. Algo más de 238.000 dólares se ha pagado por la de Bono, mientras que la del líder de Van Halen se ha subastado por 114.300 dólares.

La Fender Stratocaster negra y blanca, para zurdos, que sufrió la ira sobre el escenario del líder de Nirvana se acabó vendiendo por 596.900 dólares. Casi 10 veces su estimación original de 60.000 dólares. La guitarra fue entregada por Kurt Cobain a su amigo cercano y colaborador musical Mark Lanegan, de la banda Screaming Trees.

Kurt Cobain usó esta guitarra en la gira Nevermind

La pieza, que tuvo que ser reconstruida parcialmente, está firmada por los tres miembros de grupo y posee un mensaje escrito por Kurt Cobain: «¡Hola, Mark! Con amor, tu amigo, Kurdt Kobain / Estrella de rock acabada».

El malogrado líder de Nirvana solía destrozar contra el suelo o parte del equipo de sonido alguna de sus guitarras durante los conciertos. Esta en particular se cree que sufrió la ira del cantante y que incluso puso ser reparada antes de que finalmente la regalara.

Un instrumento personalizado

Conserva algunas de las modificaciones que Kurt Cobain realizaba en sus instrumentos. Entre ellas una pastilla Hot Rails en la posición del puente. Era una configuración que Cobain prefería para las actuaciones en vivo. También conserva la inscripción «Boddah Lives» que él mismo rayaba en la placa del cuello de la guitarra refiriéndose al amigo imaginario de su infancia.

Kurt Cobain le regaló esta guitarra a Lanegan en el otoño de 1992. Fue durante la etapa norteamericana de la gira Nevermind. El cantante de Nirvana moriría año y medio después.