Sarah Burton ya es historia en Alexander McQueen. La directora creativa de la marca durante las últimas dos décadas ponía fin a su relación con la filial de Kering este lunes. El sorpresivo anuncio, que pocos conocían en el sector, se ha justificado oficialmente en la búsqueda de una «nueva organización creativa» para la marca.
Burton, de 49 años, es la última víctima del proceso de cambio impuesto por la dirección de Kering en algunas de sus principales marcas desde hace varios meses.
La creativa ha hecho toda su carrera en la casa. Se incorporó a ella en 1997, nada más graduarse, como asistente personal del propio Alexander McQueen. Tres años después ya diseñaba personalmente los vestidos que encargaban a la casa personalidades como Michelle Obama, Cate Blanchett, Lady Gaga o Gwyneth Paltrow.
El 11 de febrero de 2010 Alexander McQueen fue encontrado muerto en su domicilio. Tenía 40 años. La investigación posterior reveló que el diseñador se suicidó tras la depresión que le provocó la muerte de su madre, días antes. Nadie en Kering puso en duda que su sucesora al frente de la marca debería ser Sarah Burton. Un año después llegaría su primer gran éxito al diseñar el vestido de novia de Kate Middleton.
Alexander McQueen no es ni de lejos la marca insignia del grupo Kering. Esa responsabilidad recae a fin de mes en los números de casas como Gucci, Saint Laurent, Bottega Veneta o Balenciaga.
Pero entre todas no están haciendo que las cuentas del gigante del lujo mejoren. Algo que también se refleja en el periplo en Bolsa del grupo, que desde los máximos marcados en agosto de 2021 se ha dejado un 40 % de la cotización.
En marzo de 2022, Kering puso al frente de Alexander McQueen a un nuevo director ejecutivo. Se rumorea que la relación entre Gianfilippo Testa y Sarah Burton no era precisamente muy amistosa. Oficialmente, ninguna de las dos partes ha comentado el motivo. Todo son palabras de agradecimiento mutuo por el trabajo realizado.
El papel de las marcas pequeñas en Kering ha cambiado en los últimos años. François Pinault ya dijo que se iban a centrar en las grandes firmas. No se espera sin embargo una venta o escisión de Alexander McQueen. Entre otras cosas porque la matriz controla la totalidad del negocio tras adquirir a la familia del fallecido diseñador el resto de las acciones.
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