El mercado de fichajes de directores creativos, en plena ebullición

El mundo de la moda de lujo está experimentando una ola de cambios y agitación entre sus directores creativos. La reciente renuncia de Virginie Viard como directora creativa de Chanel es uno de los ejemplos más destacados, pero hay más.

Chanel busca a su cuarto director creativo en más de 100 años

Viard, quien tomó las riendas de la Maison en 2019 después de la muerte de Karl Lagerfeld, anunció su salida en junio de 2024, cerrando una etapa de más de treinta años en la firma. Su renuncia ha dejado vacante una de las posiciones más codiciadas y visibles del mundo de la moda, lo que ha desatado una oleada de especulaciones sobre quién será su sucesor.

El desfile de Chanel durante la Semana de la Moda de París, celebrado en el Grand Palais, fue la última presentación de Viard. Ella fue la tercera persona en ocupar el puesto tras Karl Lagerfeld y la propia fundadora, Gabrielle «Coco» Chanel, como directora creativa.

Su llegada al cargo en 2019 fue vista como un paso lógico, dado que llevaba años trabajando al lado de Lagerfeld como su mano derecha. Viard mantuvo el legado de la casa con colecciones que respetaban los códigos tradicionales de Chanel, pero sin desviarse radicalmente de su herencia creativa. Sin embargo, en un sector tan competitivo como la moda de lujo, los cambios en la dirección creativa son inevitables. Y ahora Chanel ahora se enfrenta a la tarea de encontrar a su cuarto director creativo en sus más de 100 años de historia.

Directores creativos de la moda de lujo

Entre los nombres que se barajan como posibles sucesores de Viard destacan algunos de los grandes talentos de la industria. Es el caso de Hedi Slimane, quien recientemente dejó su puesto en Celine; Pierpaolo Piccioli, ex director creativo de Valentino; o incluso Marc Jacobs, ex de Louis Vuitton durante muchos años y dueño de su propia marca. Quien sea que asuma el cargo en Chanel se enfrentará al desafío de continuar con el éxito comercial de la firma, que ha visto un crecimiento sostenido en los últimos años.

La renuncia de Viard es solo una de las varias que han sacudido el mundo de la moda en los últimos meses. Hedi Slimane dejó Celine hace solo unas semanas, muy poco después de presentar la colección de verano 2025 de la marca en la Semana de la Moda de París. Slimane había estado al frente de Celine desde 2018, donde transformó la estética de la firma con su característico estilo rockero. Su salida se produjo tras meses de especulación sobre tensiones contractuales entre el diseñador y LVMH, el conglomerado propietario de Celine.

Cambios también en Fendi

Otro cambio reciente es la partida de Kim Jones de Fendi. Jones, quien también es director creativo de Dior Men, había estado a cargo de la alta costura, prêt-à-porter y peletería de Fendi desde 2020, sucediendo al icónico Karl Lagerfeld en la maison romana. Aunque Jones dejó su puesto en Fendi este mismo mes, se mantendrá en su rol en Dior Men, lo que marca un reajuste más en el complicado entramado de las casas de moda de lujo.

Estos cambios en la dirección creativa de algunas de las marcas más grandes de la moda no son coincidencia. La industria del lujo ha estado experimentando una desaceleración en las ventas, en parte debido a la disminución de la demanda en mercados clave como China. Esta caída ha puesto nerviosos a los inversores y ha generado presión sobre los diseñadores, que tienen menos tiempo para establecer su visión antes de ser evaluados por su impacto en las ventas.

Además, los directores creativos de las grandes casas de moda ahora también se enfrentan a la expectativa de revitalizar las marcas y atraer a audiencias más jóvenes. Lo que añade una capa adicional de complejidad a su trabajo. Esta demanda de innovación y relevancia cultural está empujando a los diseñadores a trabajar más allá de las pasarelas, creando una fusión entre la moda y otras formas de expresión artística y cultural.

Así, el llamado «baile de los directores creativos» en la industria del lujo no muestra señales de detenerse. Cada movimiento en el tablero tiene el potencial de reconfigurar las dinámicas de poder en el mundo de la moda, y con tantos puestos clave aún vacantes, las próximas decisiones podrían determinar el rumbo de algunas de las marcas más icónicas del mundo.