Las marcas, dermatólogos, asociaciones contra el cáncer y medios de comunicación han logrado cambiar nuestro comportamiento una vez que sale el sol más intenso. Por eso, el protector solar no falta en nuestro cuidado diario, independientemente de si vamos o no a la playa. El factor de protección SPF 50 es imprescindible en el asfalto también.
Sin embargo, con la bajada de las temperaturas y los días más grises, tendemos a pensar que todo el monte es orégano. Y para nada. El frío irrita la piel. Además, la calefacción, el aire caliente del coche, el descenso de ingesta de verduras frescas y agua, la menor salida a pasear al aire libre… son factores que contribuyen a que nuestra piel sufra una pérdida de hidratación, luminosidad y esté más sensible. Y así comenzamos a sentir la piel “tirante” en la cara y de lagarto en las piernas… pero no solo ahí. Por eso es importante hacernos con productos específicos que nos ayuden a tener una piel sana y bella todo el año.
Avene ha lanzado este año Cicalfate, una nueva línea versátil y que puede utilizar toda la familia para reparar la sequedad e irritación de los labios. Otros productos clásicos que propongo para estas fechas de frío son los Lip Balm de Kielh´s y de Biopel, que no falta en el neceser de muchísimos maquilladores profesionales.
Las manos también se resecan y las notamos ásperas. Para evitar las grietas y protegerlas del frío y el viento es obvio que no hay nada mejor que unos guantes, pero agradecerán también que una vez a la semana les apliquemos una crema hidratante y nos enfundemos después unos guantes de algodón calientes. A los veinte minutos los retiramos y voilà, nuestras manos serán como la seda.
Las piernas no se hinchan ni retienen líquidos como en verano, pero necesitan atención ya que la circulación de la sangre es más lenta en invierno. Así que un buen aceite de abedul les vendrá de perlas. Lo mejor es aplicarlo antes del descanso nocturno.
Y si tienes tiempo y presupuesto, aprovecha un día de lluvia para disfrutar de un tratamiento en cabina realizado por manos profesionales. Por ejemplo, regálate el C-Radiance lift con los productos de la marca Miriam Quevedo en The Beauty Concept, en el centro de Madrid. Una hora y media de desconexión para tu mente pero no para tu piel. Gracias al compuesto de vitamina C y oro de 24 quilates tu cutis lucirá luminosidad de inmediato y mostrará un aspecto relajado. Los compuestos activos, además, trabajan con las manchas de pigmentación. No olvides que el invierno es el mejor momento para hacer tratamientos despigmentantes de la piel.
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