Regalarse tiempo es algo que no valoramos hasta que lo perdemos, o volvemos a encontrarnos con ese momento propio. Regalarnos tiempo se parece a cuando silencias el teléfono, o pones el modo ‘no molestar’ e incluso el modo avión. Porque el tiempo se va y no es bueno estar tan alerta siempre.
Y ese alerta es un grandísimo defecto de los periodistas, que vivimos pendientes de todo, que necesitamos controlarlo todo. A veces, es bueno que el tiempo pase, y a la vez disfrutarlo. Y así es como vamos a enfrentarnos al 2022, con el tiempo que hay que disfrutar y aprovechar. Y uniendo esos dos puntos en común, hemos ido a descubrir cómo es el tratamiento del que todo el mundo habla: el súper-facial Skin Glow by Venus Concept.
No es invasivo, es un revitalizante facial que te aporta luz y relajación. Además, cuando estás tranquila, te ves mejor. Y si además tu piel brilla, no hay combinación que lo supere.
Skin Glow es el nombre de este protocolo. Un ritual facial de Venus Concept, líder mundial en el mercado médico-estético como fabricante de la mejor tecnología no invasiva y mínimamente invasiva de su categoría, para brillar en cualquier ocasión. Y si ya ves en el horizonte San Valentín, mejor que mejor. El objetivo es una piel limpia e iluminada. Así, jugosa.
Lo hace como ‘barriendo’ la cara de impurezas, sacando todo lo malo y activando la circulación, para que el protocolo cumpla ese toque de brillo, de vitalidad. Se empieza con una limpieza en profundidad, eliminando células muertas y controlando la grasa; y al mismo tiempo, enriqueciendo el tejido con la activación de la circulación. Todo para revitalizar la piel.
El protocolo empieza con una mousse limpiadora, utilizando una pequeña dosis de ácido glicólico, con el objetivo de potenciar la descamación superficial de las células muertas de la epidermis. Cero invasiva y muy suave.
Después un tónico que regula el pH de la piel, el más adecuado a cómo estés en ese momento: granos, más grasa, más seca. Por eso es importante ponerte en manos de profesionales, para personalizar cada tratamiento.
Una vez la piel está limpia, empieza la máquina Venus Glow a trabajar. Lo que más destaca es el doble chorro de agua desmineralizada mezclada con varios sérum. No duele, no molesta, es súper refrescante, no deja la piel roja.
Con el protocolo hecho, se trabaja la piel con un masaje. Y para finalizar, te aplican una mascarilla impregnada con activos antioxidantes, anti-age, antiinflamatorios, hidratantes y drenantes, entre los que destacan el ácido hialurónico de bajo peso molecular, centella asiática, árnica, caléndula, mimosa, hamamelis, aloe vera y vitamina E, entre otros. Calmante total.
En Mimôt Beauty, un lugar pequeño, casi escondido, cálido y confortable, del que no querrás salir. Un espacio de belleza en la Milla de Oro de Madrid, c/ Núñez de Balboa 39, y del que te querrás llevar hasta el papel pintado de Laura Ashley.
Su precio es de 150 euros durante 90 minutos, que volarán. Sin duda, uno de los tiempos mejor invertidos para quererte y mimarte. Si puedes pedir un regalo, este va a ser tu top del amor.
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