En los últimos años la cosmética coreana ha ido ganando presencia en nuestro país. Primero llegaron las bb creams, un producto que une la base de maquillaje con la crema hidratante diaria, para matificar el tono de la piel, hidratar la cara y eliminar imperfecciones. Pero para conseguir la perfección de sus rostros es necesario seguir un ritual de limpieza e hidratación facial conocido con el nombre de glass skin.
Esta rutina de belleza que en español podemos traducir como ‘Piel de cristal’ tiene como principal objetivo conseguir una piel hidratada, jugosa y llena de luz sin necesidad de maquillaje, es decir, conseguir ese efecto natural de ‘buena cara’ tan deseado. Y para ello es necesario seguir rigurosamente estos diez pasos:
El primer paso para conseguir la glass skin es desmaquillarse correctamente. Para ello se van a utilizar dos productos, uno en formato de aceite y otro con base acuosa. El primero es perfecto para quitar el maquillaje de la piel, mientras que el segundo, gracias a su composición, penetra mejor en el poro, eliminando cualquier resto que el aceite no haya conseguido quitar.
El aceite limpiador de Clean Energy Gentle Cleansing de Origins posee una fórmula avanzada compuesta por aceites de girasol, sésamo y cártamo que elimina el maquillaje y las impurezas en una sola pasada. Además, posee vitamina E que ayuda a reparar los daños causados por agresiones medioambientales. Nuestra maquilladora de referencia, Regina Capdevila, también incide en este paso en el siguiente vídeo:
Aunque puedas pensar que al utilizar productos desmaquillantes tu piel ya está limpia, esto no es real, ya que los aceites desmaquillantes suelen dejar rastro en la piel. Por ello, para dejar la piel completamente limpia deberás utilizar un segundo limpiador que, además, elimine restos de sudor y la suciedad acumulada por la contaminación.
Para limpiar tu piel de forma adecuada, lo mejor es utilizar un dispositivo de limpieza FOREO. Luna 3 es la última tecnología en sumarse a la marca sueca. Incorpora nuevos filamentos que ayudan a limpiar mejor el poro y se puede conectar con una app para sacarle el máximo partido.
Tras esta limpieza en profundidad, llega el turno del exfoliante. Con este producto conseguiremos eliminar las células muertas de la piel y mejorar su textura. Eso sí, el exfoliante solo deberás aplicarlo una o dos veces por semana, ya que es un tratamiento más agresivo.
En caso de que tengas la piel sensible, trata de exfoliarla cada 10 días y prueba el producto antes en una zona pequeña de la cara para ver cómo afecta a tu piel. Yo te recomiendo uses el exfoliante de arroz y arándanos BIO de Nivea. Es un producto muy suave y nada agresivo que te ayudará a eliminar las células muertas y dejar la piel perfecta.
Después de la exfoliación (o la limpieza en profundidad) tienes que aplicar un tónico. Este producto nos ayudará a hidratar la piel después del tratamiento, equilibrar el ph y dejar el rostro listo para aplicar el resto de productos de la rutina glass skin. Además, también favorece la absorción de los productos. El DermatoCLEAN Tónico de Eucerin es perfecto para todo tipo de pieles, ayuda a oxigenar el cutis antes de aplicar un nuevo tratamiento y no contiene perfumes, alcohol, ni colorantes.
El paso más importante de esta rutina es la mascarilla, uno de los clásicos de la cosmética coreana. Al igual que el exfoliante, con aplicarla una o dos veces a la semana será suficiente. En Sephora puedes encontrar una gran variedad de mascarillas faciales inspiradas en la K-beauty. Estas mascarillas son una finita tela impregnada de producto que debes colocar sobre la cara y esperar unos tres minutos a que tu piel absorba el producto. Una vez haya pasado el tiempo no te enjuagues la cara con agua, date pequeños masajes circulares hasta que el producto esté totalmente absorbido.
Tras la mascarilla hay que aplicar la esencia. Seguramente nunca hayas escuchado hablar de este producto. Viene también de la cosmética coreana, tiene una textura ligera y fluida y posee altas dosis de ingredientes activos que te ayudan a hidratar la piel y nutrirla en profundidad. La esencia es el producto estrella de las mujeres coreanas, ya que ayuda a mejorar la textura de la piel, reducir las arrugas y aumentar la luminosidad del rostro. La marca de cosméticos Caudalie posee la esencia de agua de uva, un producto en formato spray que hidrata el cutis y calma al instante las pieles más sensibles.
Después de la esencia siempre hay que aplicar un sérum, uno de los productos más utilizados en la cosmética. Los sérums son fórmulas especiales que se suelen emplear para tratar un problema específico como suelen ser las arrugas o la falta de luminosidad. Sus fórmulas están preparadas para penetrar en las capas más profundas de la piel y conseguir hidratar aquellas zonas a las que las cremas hidratantes de uso diario no llegan.
Con aplicar tres o cuatro gotas sobre el rostro y extenderlo de forma adecuada por toda la cara bastará. El el sérum Advanced Genifique de Lancôme es perfecto para que tu piel recupere su brillo y luminosidad características.
El siguiente paso es el contorno de ojos, un producto que muchas mujeres no suelen utilizar, pero que es tan importante como la crema hidratante. La piel que cubre la ojera y que está alrededor de los ojos es más sensible y fina que la del resto de la cara, por ello, debemos aplicar productos específicos para evitar que sufra.
Los contornos de ojos nos ayudan a hidratar la piel, reducir las bolsa y ojeras, y prevenir la aparición de los primeros signos de edad y líneas de expresión. El contorno de ojos Pigmentclar de La Roche-Posay ayuda a reducir la apariencia de ojeras azules y favorece la circulación en la zona, mejorando el aspecto de la cara al instante.
El penúltimo paso es la crema hidratante, un producto que además de hidratar la piel, también ayuda a sellar todos los productos que hemos aplicado antes. Actúa como barrera contra la contaminación y otro tipo de agresiones externas. La crema Moisture Surge de Clinique ayuda a la piel a crear su propia fuente de hidratación para que esta pueda rehidratarse sola de forma continua durante más de 72 horas.
Y el último paso para conseguir la glass skin es el protector solar. Protegerse de los rayos del sol es muy importante no solo en verano, sino también en invierno, ya que las radiaciones UV del sol inciden, aunque con menor intensidad, sobre la piel pudiendo provocarnos lesiones.
Lo mejor es utilizar una crema de protección solar con factor protector de +50, el más alto que puedas encontrar en las tiendas. Athelios imperfections de La Roche-Posay ayuda a proteger tu piel al mismo tiempo que corrige imperfecciones y regula el sebo de tu cutis. La crema solar perfecta para cerrar con todo el tratamiento de la glass skin.
Una vez hayas aplicado todos estos productos en el orden indicado, notarás cómo tu cara está más jugosa y goza de un aspecto luminoso y brillante. En definitiva, conseguirás, tal y como indica su nombre, una piel de cristal. Y es que cuidar la piel es fundamental para tener un buen aspecto. Empieza ya tu rutina de glass skin y luce en invierno una cara luminosa y radiante.
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