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Si hay algo que genera tanta expectación en un boda como el vestido de la novia, es su peinado. Las posibilidades son infinitas. Desde moños altos, bajos, semi recogidos, recogidos más elaborados e incluso el pelo suelto con más o menos movimiento. Todo depende del estilo y personalidad de la protagonista, de su tipo de pelo, así como del diseño del vestido. La semana pasada acudimos, aunque solo fuese por la pantalla de televisión, a una de las bodas más esperadas del año: la de Meghan Markle y el Príncipe Harry. Desde que se anunció su compromiso, mucho se ha hablado sobre el vestido de la actual duquesa de Sussex, así como de quién lo iba a diseñar. El velo era la parte más especial del outfit de Meghan Pero, a la hora de la verdad lo que más impresionó fue su velo de organza de cinco metros de largo y un mensaje oculto, ya que llevaba 53 rosas bordabas en homenaje a los 53 países que forman parte la Commonwealth. Bajo este velo, Meghan Markle, fiel a su sencillez, optó por un moño bajo no muy pulido que dejaba al aire unos mechones por la parte de delante. La sencillez y la elegancia suelen ser máximas compartidas por royals de casi todas las casas reales, sobre todo para los días de sus enlaces. Un toque de distinción sin caer en la sosería es lo ideal y lo que te puede aportar un peinado acertado. Nos gustó mucho el moño de Meghan, pero hemos visto que no ha sido la única que lo ha lucido en su boda. Los príncipes Charlene y Alberto de Mónaco el día de su enlace Fue el 2 de julio de 2011 cuando el príncipe Alberto de Mónaco se unía en matrimonio a la Charlene Wittstock, a partir de ese día princesa de Mónaco, que lucía un sencillo moño bajo que dejaba al descubierto su rostro. Fiel a su imborrable sonrisa, la Princesa Magdalena de Suecia también se dejó cautivar por la elegancia de un moño bajo para su peinado de novia. Un estilismo muy similar al de Meghan Markle, con velo y tiara. Magdalena y Sofía de Suecia, con un peinado muy similar, en sus bodas. Su cuñada, Sofía de Suecia también optó por un moño bajo como peinado de boda aunque, en esta ocasión mucho más elaborado que el de Meghan Markle. Ya se trate de princesas o de plebeyas lo que está claro es que si la novia quiere ir sencilla a la vez que elegante, una de las opciones más bonitas es la del moño bajo ya que da un toque de sofisticación y suele ser muy favorecedor.

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