Ejercicios de yoga facial para mantener el rostro joven y sin arrugas

Uno de los deseos que tenemos todas las mujeres es que nuestro cutis se mantenga terso para siempre. Con el fin de alcanzar este imposible, nos aplicamos cremas, sérums, mascarillas e incluso recurrimos al bótox y la cirugía estética para lucir perfectas. No obstante, también podemos ejercitar los músculos de la cara para recuperar la elasticidad de la piel y hacer que el rostro parezca más joven. Ahora que estamos en casa, reserva 10 minutos del día para poner en práctica estos sencillos ejercicios de yoga facial y estimula la producción de colágeno y elastina.

En total poseemos más de 30 músculos faciales que se encargan de realizar los movimientos expresivos. Trabajar estos músculos es fundamental para fortalecerlos y tonificarlos, «al igual que sucede con los músculos del resto del cuerpo». Así lo asegura Laura Parada del centro de estética y nutrición Slow Life House: «Con el yoga facial se trabajan los músculos de la cara evitando su pérdida de volumen y tonicidad. La manera de hacerlo es a base de ejercicios repetitivos, estiramientos y masajes». Si te interesa esta disciplina, sigue leyendo, te proponemos una rutina sencilla para estar simplemente radiante.

Tonifica los músculos del cuello

El primer ejercicio que te presentamos se llama Neck roll’. Coloca la cabeza en posición neutral, mirando hacia adelante. Después gírala hacia el lado derecho hasta dejarla alineada con el hombro. Deja la cabeza en esta posición entre 6 y 8 segundos y después vuelve a la posición original. Luego realiza el mismo movimiento hacia la izquierda y repite cada ejercicio 3 veces. Con el Neck roll’ conseguirás levantar y tonificar los músculos del cuello.

Una vez lo hayas terminado, vuelve a la posición inicial y coloca las puntas de los dedos en la parte superior del cuello, después, con cuidado ve deslizándolos hacia abajo e inclina la cabeza hacia atrás. Una vez lo hayas hecho, repítelo dos veces más. Con este ejercicio tonificarás el músculo de la parte frontal de cuello, ayudando a reducir las arrugas y reducir la flacidez de la piel.

Di adiós a la papada

El siguiente ejercicio de yoga facial está destinado a acabar con uno de los complejos de muchas mujeres, la papada. Coloca una mano debajo de la barbilla, como si estuvieras sujetando la cabeza. Con movimientos suaves empuja la barbilla hacia abajo. Ve alternando este movimiento con cada una de las manos y repítelo de forma constante durante tres respiraciones profundas.

Besar el cielo es el nombre de este ejercicio que te ayuda a devolver la firmeza a la línea de la mandíbula y al cuello. Para realizarlo solo tienes que echar la cabeza hacia atrás, hasta estar mirando al cielo, y sacar morritos, como si fueras a dar un beso. Estoy segura de que has visto u oído hablar de este ejercicio más de una vez.

Elimina las bolsas y las arrugas de la frente

Forma una V con los dedos, colócalos en los extremos de los ojos, ejerce un poco de presión y masajea la zona con movimientos arriba y abajo. Con este sencillo ejercicio conseguirás reducir las molestas bolsas que se nos forman bajo los ojos, las conocidas ojeras que con el paso de los años son más difíciles de disimular.

Ahora forma una C con las manos, colocando los pulgares en los mofletes y los índices en los límites de las cejas. Después empuja con suavidad con los índices hacia arriba, como si tratases de levantar las cejas y abre mucho los ojos. Mantén esta postura durante dos segundos y luego relaja la cara. En total debes hacer tres repeticiones y en la última, aguantar 10 segundos. Con estos sencillos estiramientos pretendemos reafirmar la frente y reducir las arrugas y líneas de expresión.

Una piel luminosa y cuidada

Y para lucir una piel brillante cada mañana sin necesidad de maquillaje, lo que tienes que hacer es darte pequeños pellizcos por toda la cara, las mejillas, la nariz, la frente…. De esta manera, activas la circulación y estimulas la producción de los agentes encargados de aportar volumen. No seas bruta, no estamos hablando de pellizcos de verdad, sino pequeños apretones de la piel.

Una vez hayas realizado estos sencillos ejercicios, sigue con tu rutina de cuidado facial diaria. Limpia la cara adecuadamente, aplica tu crema hidratante, tu sérum y contorno de ojos, con suaves masajes, y aprovecha que no salimos de casa para dejar respirar la piel y no usar maquillaje.