El de Isabel II y otros abrigos que la princesa Ana ha reciclado una y otra vez
La hija de Isabel II sorprendió reutilizando ayer un abrigo de su madre pero tiene en su armario varios favoritos que no duda en repetir.
De todos es sabido el carácter austero y el particular estilo de la princesa Ana, que incluso ha inspirado la última colección masculina de Fendi. Por eso no es de extrañar que la segunda hija de Isabel II sienta predilección por algunas prendas que saca del armario una y otra vez. Ayer, sin ir más lejos, utilizó un abrigo morado que perteneció a su madre. Pero además de este, cuenta en su vestidor con prendas que ha repetido hasta en cinco ocasiones, algo sin duda inusual en personalidades de su condición. De entre todas, la princesa Ana tiene varios abrigos favoritos que ha sacado del armario una y otra vez. Los recordamos.
La princesa Ana recicla una chaqueta de Isabel II
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La única hermana de Carlos III ha demostrado siempre su gusto por los colores fuertes que tanto utilizaba su madre. Prueba de ello es la última prenda que ha lucido y que perteneció a su difunta madre. Se trata de una chaqueta de color morado de ante, cuello caja y botonadura central que su madre estrenó en julio de 2006.
Lo usó concretamente a bordo del Hebridean Princess, un barco en el que disfrutaría de un crucero de ocho días por las islas escocesas con motivo de su 80 cumpleaños. La prenda la lució en su primera llegada a puerto, en la isla de Islay, a la que descendió ataviada con unos pantalones negros (muy inusuales en ella) y un pañuelo de seda estampado cubriendo su cabeza. Ayer, su hija decidió utilizar la chaqueta con una falda al tono por debajo de la rodilla, botas altas y un pañuelo de seda, también estampado, pero en su caso alrededor del cuello.
El rojo que no pasa de moda
Esto sucedió el martes, pero ayer mismo la princesa Ana lució otro abrigo que nos era familiar. Se trata de uno rojo muy ponible que lleva utilizando durante años. De largo midi, con grandes solapas y botonadura doble, se lo hemos visto en distintos actos desde, quizás, 2009. Ayer fue con él a la visita al Regimiento de Entrenamiento de Eliminación de Artefactos Explosivos de Defensa en St George’s Barracks, en Bicester.
El abrigo beige con toque navy
Al margen de este abrigo morado, que a buen seguro le volveremos a ver, la princesa Ana tiene otros míticos. Uno de ellos es uno beige con detalles oscuros en los hombros que se ha puesto en distintas ocasiones.
La última en la celebración de la Commonwealth en mayo de 2018. Una fecha recordada porque fue la primera vez que Meghan Markle acudía a la cita y en la que la Princesa Ana recicló un atuendo histórico. La primera vez que lo usó fue en las carreras de Ascot en 1980 y posteriormente lo usó en 1985 durante un Derby, de nuevo en Ascot cinco años después y en 2014 en la Garden Party de primavera.
El mítico abrigo turquesa, de los más recordados
Para demostrar que un abrigo de inversión no tiene por qué ser de un color básico como el negro o el azul marino, la princesa Ana ha usado este abrigo en color azul turquesa en al menos cinco eventos públicos desde 2018.
Ese año lo eligió para celebrar la Pascua en Windsor y acudir a la misa de Navidad en Sandringham. En 2019 lo lució con una pashmina estampada al tono en en el Festival de Cheltenham y en 2021 en el Premio Arco de Triunfo de Qatar en el Hipódromo de Longchamps. En febrero de 2023 lo usó en un acto para reconocer al pueblo de Southampton por su plantación de árboles.
Un abrigo amarillo y azul que desafía la mala suerte
Otro de los abrigos favoritos de la princesa Ana es este amarillo y azul marino con sombrero a rayas a juego que ha salido de su armario por lo menos cinco veces. La primera en un servicio religioso en 2007 al que siguieron un viaje a Gibraltar en 2009, la boda de Lady Gabriella y Thomas Kingston en la Capilla de San Jorge (donde se casaron Harry y Meghan), un viaje a Nueva Zelanda en febrero de 2023 y otro a Jersey en julio del mismo año.
El abrigo de piel que más se ha puesto
Igual que el anterior, no hay duda de que el siguiente también entra dentro de la categoría de abrigos favoritos de la princesa Ana. Es un abrigo azul forrado en piel con los cuellos, los puños y los remates vistos. Lo estrenó con 20 años, en 1976, en la boda de Chris Collins y Susanne Lumb y posteriormente se lo puso en un evento en 1983. Sin embargo la cita en la que más lo ha usado ha sido en la misa de Navidad en Sandringham los años 2003, 2006, 2008 y 2012.
El verde, de los abrigos más especiales de la princesa Ana
Otro de los abrigos favoritos de la princesa Ana que ha reciclado varias veces es este verde. Con botonadura lateral, cuello caído y estampado geométrico, es sin duda un diseño muy especial. Lo ha lucido casi siempre con el mismo sombrero y botas altas negras.
Llevó el conjunto por primera vez a la misa de Navidad de Sandringham en 2011 y se lo volvimos a ver en el Festival de Cheltenham el 16 de marzo de 2012. Al año siguiente lo usó (sin sombrero) en el desfile de Medallas de Servicio Operativo de Afganistán en Abingdon y tres años después, en 2016, lo eligió como su conjunto para el día de Navidad. Como recuerdo al día de su estreno, también se lo puso en el Festival de Cheltenham 2020 y la última vez fue conmemorando la Commonwealth en marzo de 2023.
El ochentero amarillo de cuadros
Desafiando a la mala suerte y haciendo gala de su particular y atrevido estilo al vestir, la princesa Ana también se puso varias veces este llamativo abrigo amarillo de grandes cuadros. Lo estrenó en el Servicio religioso de Pascua en Windsor en 1987, se lo puso luego en Ascot en 1988, en un viaje a Rusia en 1990 y recientemente en uno de los actos por la coronación de Carlos III en julio de 2023.
Otro de los abrigos favoritos de la princesa Ana, en naranja
De paño y con un corte a prueba de modas encontramos otro de los abrigos favoritos de la princesa Ana. Uno naranja con solapas redondeadas que al menos se lo ha puesto en cuatro ocasiones. Lo lució en 2020 en el hipódromo de Cheltenham con pashmina blanca al cuello y gran bufanda marrón; en 2011 hizo lo propio en el hipódromo de Aintree en Liverpool. Se lo volvió a poner al año siguiente también en Cheltenham y la última vez pudo ser durante el servicio del Día de Pascua en Windsor en 2016.
