Justo un año después de su última visita Europa, Meghan Markle ha regresado al viejo continente. Lo ha hecho para asistir junto al príncipe Harry a la ceremonia de clausura de los Invictus Games. Una reaparición que ha estado marcada por los dos looks que ha escogido. Y es que si sumamos el precio de todas las prendas y complementos que ha lucido superan los 40.000 euros.
Meghan Markle ponía ayer rumbo a Alemania desde el aeropuerto de Los Ángeles. Allí los paparazzi captaban la última imagen de la duquesa antes de subirse al avión y dejaban al descubierto el lujoso look que ésta escogía para el viaje.
Apostaba por un total look azul marino, compuesto por un jersey fino de manga larga y cuello pico de J.Crew, que combinaba con un pantalón de tiro alto tipo palazzo de Ulla Johnson, cuyo precio es de 570 euros; y como zapatos los Roman Stud Flat Mule de Valentino en color blanco, valorados en 710 euros.
Un look sencillo al que daba el toque más lujoso con sus complementos. Y es que Meghan decidía viajar con sombrero de ala ancha en color blanco de Janes Saleoné, de 250 euros; unas grandes gafas de sol de color negro de Celine, valoradas en 360 euros; el bolso Bellechasse Biaude PM de Goyard, y un elegante pañuelo de estampado azul y blanco de Hermès, cuyo precio asciende a 1.050 euros.
Todo ello, sin contar con sus dos joyas inseparables. Por un lado, su reloj Tank de Cartier, valorado en 24.200 euros, y por el otro, la pulsera de oro amarillo Love de la misma firma, cuyo precio es de 6.850 euros.
Tras este despliegue de firmas, Meghan llegaba a Düsseldorf y se cambiaba de ropa para asistir a los Invictus Games. Volvía a apostar por un total look oscuro, esta vez en color negro, en el que el protagonista fue un elegante vestido tipo camisero abotonado, de manga larga, ceñido a la cintura y falda con vuelo de Banana Republic. Un diseño sencillo cuyo precio es de 130 euros.
Lo combinó con unos salones negros de Aquazzura de 715 euros, y un cinturón fino de Bottega Veneta. Además de sus inseparables reloj y pulsera de Cartier. A ellos añadió un pequeño anillo con un diamante cuadrado que llevaba en el dedo meñique, y que pertenece a la firma Lorraine Schwartz.
Como ya es habitual desde hace décadas, Carlos III reunirá esta Navidad a los miembros… Leer más
Tener una camiseta firmada por Messi, Lamine Yamal o Xavi Hernández y además contribuir con… Leer más
En el corazón de La Mancha y con leche cruda de oveja se elabora el… Leer más
‘El Dalí más grande del mundo’. Ese el título elegido por el Teatro Fernando de… Leer más
El grupo Kering afronta 2025 con nuevos retos y entre sus planes estaría una reorganización… Leer más
Los príncipes de Gales por fin han publicado su felicitación de Navidad. El príncipe William… Leer más