Harry y Meghan Markle han conseguido lo que anhelaban desde hace meses. Una separación por fascículos que comenzó a principios de noviembre, cuando la pareja se trasladó a Canadá a pasar unos días y se acabó quedando. Con el paso de las semanas y tras su ausencia de la pareja en compromisos relevantes de la familia se pasó de la sorpresa a la perplejidad. Así hasta que a principios de año, tras su primer acto oficial en meses, enviaron un comunicado a través de sus redes sociales dejando claras sus intenciones.
Lo que parecía un cabreo temporal, otra de las habituales salidas de tono del miembro más díscolo de la familia, se convirtió en el mayor terremoto que han vivido en Windsor y Buckingham en años. Uno de sus miembros más relevantes, hijo del heredero y nieto de la Reina, quería dejar sus funciones y empezar con su esposa una vida nueva sin títulos, prebendas y obligaciones reales.
Isabel II tuvo que mediar en el conflicto familiar generado tras la decisión. Ni el príncipe Carlos y ni William han perdonado aún a Harry. Le impusieron unas condiciones de salida muy duras y tras la mediación real, se suavizaron algo. Hoy conocemos que será su padre el que ayude a su hijo a empezar su nueva vida sin «apreturas». Será Carlos de Inglaterra el que pague durante un año una cantidad no revelada para gastos corrientes de su hijo. Dinero, eso sí, que saldrá de su propio bolsillo. No del Ducado de Cornualles, ni del erario público.
Entre esos gastos se encuentra el más relevante, la seguridad de la pareja y su hijo. La cifra que pagarán Harry y Meghan ronda los 4 millones de libras al año. El gasto principal son los sueldos de sus guardaespaldas, exmiembros de las fuerzas especiales británicas. Entre dos y cuatro miembros, dependiendo de sus movimientos.
El epílogo dentro de la Corona lo han escrito Harry y Meghan Markle en su cuenta de Instagram. Con todo su equipo reducido a la mínima expresión desde hace dos meses y sus redes sociales convertidas en un tablón de anuncios, la pareja colgaba anoche un escueto mensaje de despedida y agradecimiento a sus 11,3 millones de seguidores: «Gracias a esta comunidad por el apoyo, la inspiración y el compromiso compartido con el bien en el mundo. Esperamos volver a conectarnos con vosotros pronto. Hasta entonces, cuidaros». Acto seguido y sin community manager que gestione sus redes, quedaban bloqueados todos los comentarios a sus publicaciones. La firma desde ahora: Harry y Meghan.
*Foto principal: Gtres
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