Foto: Gtres.
La combinación de colores vivos y llamativos ya no está limitada a la primavera y el verano. Ya nos lo ha dejado claro la tendencia del Portuguese Girl. Sin embargo, parece que las royals todavía no se atreven a dar el paso y en las últimas semanas han confiado en los looks monocolor. Lo hemos visto este fin de semana con Carolina de Mónaco, la princesa Charlène o Carlota Casiraghi, pero también otras royals como Kate Middleton o la reina Letizia han apostado por ello.
Mónaco se vestía de gala este fin de semana con motivo del Día Nacional del Principado y su familia real salía a las calles para celebrarlo. Charlène de Mónaco se protegió del frío con un total look de Diderangelo compuesto por un abrigo con solapa XXL y doble botonadura en un potente color rojo. Un tono que dominó en su look, puesto que escogió un tocado, joyas y botas Manolo Blahnik de la misma tonalidad.
Sin embargo, no fue la única que decidió apostarlo todo al rojo. Carlota Casiraghi siguió la misma tendencia con un elegante conjunto de chaqueta y falda de tweed de Chanel valorado en más de 8.000 euros. Un look menos abrigado que el de Charlène y que ajustó a su silueta con un cinturón.
Ambas royals apostaron por looks monocolor en rojo, una tonalidad asociada a la fuerza, la pasión y la vitalidad, un mensaje que quizás buscaban trasmitir. Estos son muy similares al tono burdeos que transmite elegancia, sobriedad, sensualidad o pasión, y que escogió Beatrice Borromeo.
La royal fue una de las más elegantes con un conjunto de chaqueta y falda de terciopelo en burdeos, largo midi y detalles de botones que firmaba Dior.
La que apostó por la sencillez, sobriedad y elegancia del color negro fue Carolina de Mónaco. La madre de Carlota Casiraghi escogió un color que define a la perfección su estilo.
Lo hizo con un conjunto de chaqueta y falda de tweed de Chanel. Un look negro, con detalles blancos y que completó con una pamela de color blanco y unos zapatos de tacón sensato de Louboutin.
Algo más atrevida fue Kate Middleton con su look monocolor de Emilia Wickstead la semana pasada. La princesa de Gales se decantó por el morado para su traje, un tono que representa la creatividad, imaginación y sabiduría. Mientras que la reina Letizia siguió los pasos de Carlota Casiraghi y Charlène de Mónaco con el rojo.
Sin embargo, no fueron las únicas. Victoria de Suecia también se sumaba esta semana a la tendencia monocolor con un traje de Zara. En su caso, se atrevía con el naranja, un color más estridente asociado a la alegría y calidez, pero también a la ambición.
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