Billy Porter y el esmoquin/vestido que le ha convertido en el mejor de la alfombra roja
Billy Porter se ha convertido en el mejor vestido de los Globos de Oro gracias a su original y arriesgado esmoquin/vestido.
Billy Porter ha sido para muchos el mejor vestido de la alfombra roja de los Globos de Oro. Su espectacular esmoquin/vestido no ha dejado indiferente a nadie y ha conquistado a los expertos de moda. Aunque siempre se otorga el título de mejor vestido a una mujer, el cantante y actor está consiguiendo cambiar las normas, y con su estilismo en los Globos de Oro ha marcado un antes y un después.
Billy Porter se corona como el mejor vestido de los Globos de Oro
Como si fuera una continuación del look con el que impactó en los Oscar de 2019, Billy Porter ha vuelto a escoger el esmoquin como base de su look. El actor reinventa el traje masculino más clásico para convertirlo en un diseño de alfombra roja que muchos ya han calificado como el mejor de los Globos de Oro.
Un vestido/esmoquin de terciopelo en color magenta, compuesto por una especie de abrigo/americana con solapas, debajo de la cual llevaba una camisa blanca con pajarita, y que termina en una voluminosa falda con cola. Un espectacular y llamativo diseño que firmaba Christian Siriano, y con el que el actor ha vuelto a romper las normas de la alfombra roja.
Un esmoquin/vestido con una larga cola y de color rosa
«Entrego un premio de Ryan Murphy y me pidió venir con el vestido que lucí en los Oscar, pero yo no repito looks, así que Christian Siriano me hizo algo diferente. Los diseñadores ahora se quedan sus looks, por lo que no tengo un lugar especial para mis vestidos en casa a lo Barbara Streisand. El vestido que he llevado que tengo más cariño es el que llevé en los Oscar, porque me sentí como Cenicienta», contaba el propio Billy Porter.
Un estilismo brillante que completó con unos botines de plataforma plateados y varias joyas. En las orejas lució pendientes tipo ear cuff de Stéfère Jewelry y en las manos varios anillos de la firma House of Emmanuele.
Un estilismo de diez con el que Billy Porter ha puesto en jaque los estándares de masculinidad y feminidad, y lanza un importante mensaje de diversidad al mundo, en uno de los mayores escaparates de Hollywood.