El secreto de la casa más cara de España

Tengo que daros una mala noticia: llegamos tarde, ya no podemos comprar la vivienda más cara de España, cuya venta ha gestionado la inmobiliaria John Taylor en Palma de Mallorca. Su nombre no tiene desperdicio, Villa Solitaire, y está (te lo imaginarás) situada en la zona residencial más exclusiva de Mallorca, Son Vida. ¿Que cuánto ha costado? Según la inmobiliaria, el contrato se ha firmado por 65 millones de euros (casi nada).

Pero… ¿por qué elegir Son Vida? Porque fue propiedad de una acaudalada familia, los Vida, y porque dentro de la urbanización tienen campos de golf, hoteles de lujo, vistas inigualables de Palma, y hasta un castillo que data de 1900, reconvertido en hotel dentro de la prestigiosa marca internacional ‘Luxury Collection Hotel’. La historia de esta lujosa urbanización comienza, sin embargo, cuando Stephen Kusak y José Luis Ferrer Ramonella (bodeguero mallorquín) compran la finca en los años cincuenta y la convierten en lo que es hoy: la urbanización más exclusiva de Mallorca.

Es así como llegamos al año 2008, en el que el famoso arquitecto italiano Matteo Thun recibe el encargo de situar una de sus obras en lo alto de Son Vida, lo más exclusivo entre lo exclusivo. En la urbanización, la inmobiliaria ha inaugurado (nada más y nada menos) que dos oficinas, con las que prevé contentar a sus lujosos clientes, pues ya os imaginaréis que entre ellos está lo más cotizado del mercado. Deportistas como Steve McManaman o actrices como Jennifer López, ya saben lo que es vivir en este rincón.

Pero… ¿cuál es el secreto de la casa más cara de España? ¿Es el diseño del italiano? No hay duda de que es todo un acierto; la fachada representa el dinamismo de las velas de los barcos, algo que se consigue mediante la colocación de voladizos de tonos oscuros en los bordes de los dos forjados. El de la planta superior sostiene el de la inferior mediante cables tensores de acero. Toda una provocación estructural que sirve, además, de protector solar.

La Villa Solitaire está orientada al sur, gozando su acristalada fachada de una inmensa privacidad, mientras recibe los poderosos rayos de luz solar la mayor parte del tiempo. Abarca el terreno unos 4.250 metros cuadrados, de los que una buena parte se destina a jardín botánico. Dentro de esta parcela está la residencia, que ocupa 2.300 metros cuadrados divididos en 7 dormitorios, 6 baños, 2 piscinas y terrazas que alcanzan los 2.000 metros cuadrados.

La edificación está compuesta por tres plantas; la planta baja con la zona de día, la primera planta con la zona de noche (of course), la planta sótano con garaje subterráneo para seis vehículos, que cuenta con un sistema audiovisual que permite convertirlo en un club privado, el gimnasio con sala de tratamientos corporales y el área de servicio. Y lo mejor (si no cuentas las piscinas) es la cubierta que sirve de terraza, preparada para albergar un cine al aire libre… ¡Con el que ser el anfitrión perfecto en las noches de verano!

¿Puede ser el secreto de esta vivienda su ascensor acristalado? Recorre las plantas mirando hacia los grandes ventanales, para no perderte la puesta de sol mientras subes o bajas desde el garaje… No parece mala idea, ¿verdad? La sala de estar, con cristales posteriores para hacer aún más grande y luminosa la estancia, posee enormes puertas correderas de cristal que conectan con el exterior como si no hubiera barreras. ¡Esto sí que es calidad de vida!

Elementos singulares que pululan por toda la residencia como la fantástica chimenea abierta para los momentos más románticos, el maravilloso comedor con una mesa de madera que no querrás abandonar nunca, la cocina satélite para proveer las sobremesas más inolvidables, además de un sinfín de detalles mobiliarios como las piezas únicas de Minotti, Giorgetti y Liebhauser Home, u otras textiles de primeras marcas como Rubelli o la milanesa Dedar.

¿Será el secreto la elección del estudio de arquitectura que hizo realidad el proyecto? La construcción fue ejecutada entre los años 2009 y 2017 sobre el proyecto realizado por SCT Arquitectos, que se basó en las ideas de Matteo Thun, adaptándolas a la normativa española y las necesidades singulares de esta obra de edificación, tarea que llevaron a cabo Ángel Sánchez-Cantalejo Ramis de Ayreflor y Vicente Tomás Esteva, ambos mallorquines.

O, por el contrario, ¿estará el secreto en el material más abundante de la casa que define el exterior y el interior como ningún otro? Hablo de la piedra caliza más blanca del mercado, cuyo origen es la cantera de Matagallar, en Sevilla. Su nombre es Piedra Paloma, el mismo que tiene la empresa que la comercializa, con la que hemos hablado y que se muestra muy orgullosa de su material, una piedra capaz de soportar el hielo (ahí queda eso).

Esta piedra forma el pavimento de las principales salas del edificio, de las terrazas y de las escaleras. Impresionantes los escalones que unen la zona de día con la zona de noche, trabajando en voladizo y eludiendo las leyes de la gravedad de Newton con la máxima elegancia. La podemos encontrar en los lugares más húmedos, formando paredes y lavamanos en los baños y cubriendo el interior de las piscinas.

Siempre haciendo gala de su uniformidad material, su belleza estética y su gran resistencia, cualidades que han hecho merecedora a esta singular piedra de la confianza de grandes marcas como Dior, Louis Vuitton, Ralph Lauren o Zenith. Sí, para mí esta piedra parece ser el mejor secreto de esta lujosa residencia y está a la vista de todos… ¿Qué mejor sitio para guardar un secreto?