Brad Pitt, conquistado por un artista español

Que un buen puñado de famosos se reúnan en Los Angeles más allá de la entrega de algún premio o una reivindicación social,e es algo que no suele suceder todos los días. Si además, el elemento que los atrae es algo tan interpretativo como el arte contemporáneo, el asunto tiene miga. En las primeras horas de Frieze Art Fair en Los Angeles el atasco de celebridades (Jodie Foster, Maria Sharapova…) casi ha eclipsado la importante colección de arte que esta prestigiosa feria itinerante pone a disposición de todo aquel que quiera llevarse a casa una obra magnífica.

El evento se celebra hasta el domingo 17 de febrero en los estudios de Paramount Pictures, que se han convertido en una enorme sala de exposiciones donde se pueden encontrar objetos de arte contemporáneo de todo tipo. Detrás del mismo están los editores de una de las revistas más prestigiosas del sector, Frieze, Amanda Sharp y Matthew Slotover. En la edición de Los Angeles participan unas 70 galerías y es algo más pequeña que los eventos de Nueva York o Londres. Pero según los galeristas presentes, tiene la misma energía que exposiciones consolidadas como la Art Basel de Miami.

Su oferta seduce principalmente a gente del cine que se muestra encantada de poder comprar el mejor arte contemporáneo sin salir de su ciudad. Así lo confirmó el propio Brad Pitt a su llegada al evento: «Es hora de que tengamos una feria aquí. Espero que sigan así», dijo el actor antes de darse un paseo por las instalaciones, hacerse algún que otro selfie, interesarse por varias obras y departir amablemente con sus autores.

Entre ellos estaba el pintor madrileño Secundino Hernández, uno de los artistas con mayor proyección internacional. Catalogado como uno de los pintores más dinámicos de su generación (nació en 1975), a Frieze Los Angeles ha llevado nuevos trabajos que continúan su investigación sobre el vocabulario de la pintura. El autor de la instantánea en la que Brad Pitt dialoga con el pintor español es Matt Carey-Williams, director senior de ventas en la galería londinense Victoria Miro, que ha trasladado hasta Los Angeles la obra del pintor español.

Es posible que en los minutos que estuvieron hablando, el pintor y el actor, ambos artistas, hablaran sobre la percepción que Secundino Hernández tiene de la pintura: una actividad tanto física como cerebral, un conducto para la investigación intelectual y filosófica. En sus obras, como bien dice el pintor, «veo una danza entre lenguajes pictóricos y un equilibrio entre algo que está muy bajo control y otra cosa que es accidental». Secundino Hernández vive y trabaja en Madrid y su obra se encuentra en importantes colecciones públicas y privadas de medio mundo.

Si todo sigue adelante y su obra conquista a celebs como Pitt, no será difícil que su nombre comience a oírse aún más en locales, galerías y medios de comunicación de todo el mundo. Lo importante es que la creatividad, el arte y la cultura sigan teniendo cada vez un lugar más destacado, y si las figuras reconocidas del celuloide contribuyen a ello, bienvenidas sean.