Hace 60 años, cinco jóvenes descubrieron por casualidad uno de los lugares de interés geológico más importantes del mundo: la Cueva de Nerja. Francisco Navas Montesinos, José Luis Barbero de Miguel, José Torres Cárdenas y los hermanos Manuel y Miguel Muñoz Zorrilla solían acudir con frecuencia a una cueva conocida como Las Minas del Cementerio, sin embargo, el 12 de enero de 1959 decidieron cambiar sus planes y explorar lo que había en los túneles de esa pequeña cueva.
Así fue como los jóvenes fueron a dar con una enorme sala conocida actualmente como ‘Sala de los Fantasmas’. Para su sorpresa, allí se encontraron varios esqueletos humanos, lo que hizo que salieran asustados y avisaran a sus familias. Nadie les hizo caso, salvo dos de sus maestros que, interesados por la historia que contaban, decidieron acompañarles.
Tres meses después de esta expedición, el 19 de abril, se organizó una nueva excursión a la cueva. Esta vez con ellos iba el fotógrafo José Padial Bobadilla que, asombrado por el descubrimiento, decidió publicar las imágenes de la cueva en el diario SUR de Málaga, un hecho que marcaría un antes y un después.
Un año después y tras numerosas investigaciones, el 12 de junio de 1960 la Cueva de Nerja se abre al público, convirtiéndose en uno de los puntos de interés turístico más importantes de España. A partir de ese momento, Nerja deja de ser un pueblo dedicado a la agricultura y la pesca para convertirse en una importante villa turística.
La formación de la Cueva de Nerja se debe a un proceso geológico denominado karstificación. Por este fenómeno, el agua de lluvia disuelve dióxido de carbono del suelo y de la atmósfera, para convertirse en un agua ácida y agresiva que va disolviendo la superficie y las rocas, a medida que se va infiltrando por las grietas y fracturas. A través de este proceso, el agua va formando diferentes conductos y huecos hasta generar una gran cavidad. Se calcula que estas fracturas y grietas de los mármoles de la sierra Almijara comenzaron hace más de cinco millones de años.
La Cueva de Nerja poseen una superficie total de 35.000 m2, un volumen de unos 300.000 m3 y está dividida en dos sectores. Uno habilitado al turismo y conocido como ‘Galerías Turísticas;’ y otro no habilitado y que no se puede visitar. Este último lo forman las denominadas ‘Galerías Altas y Galerías Nuevas’.
El recorrido turístico tiene una longitud de 607 metros y 438 escalones, de los cuales 220 son ascendentes y 218 descendentes. En este apasionante recorrido, podemos descubrir los famosos espeleotemas, unas formaciones naturales por las que la cueva es conocida mundialmente, y que nos dan información sobre aspectos del pasado como el clima o los movimientos sísmicos que se produjeron en la zona.
Pero sin duda, uno de los mayores atractivos de la Cueva de Nerja son sus pinturas rupestres. Esta cueva fue el refugio de varios grupos humanos durante la prehistoria. Se calcula que hace unos 25.000 años la cueva fue el lugar donde nuestros antepasados descansaban y realizaban sus actividades diarias, como la elaboración y fabricación de instrumentos de piedra y hueso, o el procesado de alimentos para su consumo. Todo esto lo sabemos gracias a las pinturas que ellos mismos realizaron en las zonas más profundas de la cueva.
Y es que Nerja posee uno de los yacimientos más ricos del sur peninsular en lo que ha manifestaciones artísticas de la prehistoria se refiere. Cuenta con 321 grupos pictóricos y grabados parietales catalogados, que se extienden desde la entrada de la cueva.
Este gran descubrimiento le ha valido al pueblo para convertirse en uno de los lugares de interés geológico más importante del mundo. Un año después de su inauguración, la Cueva de Nerja era declarada Monumento Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural en 1985.
Y es que son muchas las personas que visitan Nerja atraídas no solo por la belleza de la localidad, sino por el gran descubrimiento que allí se produjo hace tan solo 60 años. Por ello, desde al año 2000 se viene desarrollando un proyecto de conservación integral autorizado por la Consejería de Cultura, con el fin de mantener y cuidar el arte rupestre de la cueva.
*Foto principal: @CuevadeNerja Twitter.
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