Si hay algo que echamos de menos cuando salimos de nuestro país, es la comida. Si bien es cierto que los nuevos sabores y comidas nos terminan seduciendo, no menos cierto es que el olfato se revoluciona cuando reconocemos un aroma. Esto fue lo que me ocurrió en mi último viaje a Tailandia. Después de pasar casi 10 días disfrutando de la maravillosa gastronomía Thai con platos como los Pad Thai, los rollitos Kuay Teow, Som Tum, Tom Kha Kai, pollo en leche de coco… O sus postres más famosos como helado de coco y el Kluay Buat Chi, llegó la gran sorpresa.
El último día en Bangkok fuimos a visitar el famoso mercado de Chatuchak, uno de los más grandes de Asia, con más de 15.000 puestos. Paseando por sus largos laberintos, mi olfato comenzó a reconocer un aroma patrio. La paella. Y es que entre los miles de puestos hay uno en el que trabaja un español, al que ya apodan el rey de la paella en Tailandia.
The Luxonomist pudo conversar con él y por supuesto degustar una de las muchas paellas que día a día elabora. Esas que no solo enamoran a los turistas de cientos de países que allí se juntan sino a los propios tailandeses. Su nombre es Fernando Andrés y lleva viviendo en el país de la sonrisa más de diez años.
“Llevo viviendo en Tailandia mas de diez años seguidos. La primera vez en 2001 monté el primer restaurante español en Bangkok, que se llamaba La Rioja y teníamos todo tipos de platos españoles”, nos cuenta Fernando. Pero también nos habla de cómo han recibido los tailandeses este plato: “Ya sabes que a los Tai les encanta el arroz. Su gastronomía, su cultura, está basada en el arroz. La diferencia es que ellos lo cocinan y luego lo mezclan con otras cosas. La paella les ofrece un sabor diferente por se consigue mezclando muchos ingredientes”.
Fernando nos cuenta los motivos por los que se fue a vivir a Tailandia. “Necesitaba darle un cambio a mi vida. Había pasado por un divorcio y entré en una depresión. Entendí que era el momento de salir y encontrarme conmigo mismo. Y este país me ha dado lo que buscaba. Aquí encontré el amor, una calidad humana impresionante y sobre todo, me hicieron sentir con su sonrisa como uno de los suyos. Por eso mi lema en este local es ‘Una sonrisa no necesita idiomas'”. Si viajss a Bangkok y quieres sentir el calor y la sonrisa de un español, además de degustar una rica paella, busca a Fernando en el Mercado de Chatuchak.
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