Berluti, más que calzado

Berluti ha sido seguramente una de las marcas más prestigiosas y exclusivas del mundo del calzado. Y escribo ‘ha sido’ puesto que desde hace ya unos años la prestigiosísima firma no sólo ofrece a sus clientes calzado, sino que también ha apostado por la marroquinería de lujo y la sastrería abarcando así un amplio abanico de productos que ofrecen a la firma incrementar su cifra de negocios.

Su historia se remonta a 1895, cuando Alessandro Berluti comenzó a dedicarse a la fabricación de calzado, apostando ya entonces por la elegancia y la comodidad como señas de identidad. Es ahora Olga Berluti (única mujer en el mundo dedicada a la zapatería a medida) la encargada del buen funcionamiento y dirección de la misma. Entre su selecta clientela destacan personalidades como James de Rothschild, Robert de Niro o Gerard Depardieu.

Si bien desde 1993 Berluti pertenece al grupo de marcas de lujo LVMH, ésta no ha abandonado su herencia más tradicional manteniendo sus riendas en manos de la familia que en un principio comenzó todo. Probablemente ésta sea la esencia de la firma, la cual mantiene las tradiciones más arraigadas y apuesta por la pertenencia a un gran conglomerado al que pertenecen más de sesenta marcas de renombre y propiedad de Bernard Arnault, uno de los hombres más ricos del mundo según Forbes.

LVMH es el líder de los productos de lujo, asegurando la comercialización de todos ellos a través de una red de más 2.500 tiendas implantadas en todo el mundo y alcanzando una cifra de negocio próxima a los 3.500 millones en 2013, lo que supone un incremento del 0,4% respecto al pasado año.