La apuesta inteligente de Swatch

Tissot tendrá su propio reloj inteligente el año que viene. Así lo ha confirmado el presidente del grupo Swatch, Nick Hayek, que al final ha tenido que aceptar una tendencia que hace dos años no veía del todo clara. Swatch ha experimentado desde entonces con algunos conceptos en sus diferentes marcas, como el pago mediante tecnología NFC, pero hasta el momento no había adoptado una posición clara sobre el negocio de los relojes inteligentes.

Y la apuesta parece firme y ambiciosa, porque según ha dicho Hayek, el smartwatch de Tissot saldrá al mercado con un sistema operativo propio que nada tendrá que ver con los desarrollados por Google y Apple. Para ello sus técnicos trabajan con el Centro Suizo de Electrónica y Microtecnología, que le proporcionará entre otras cosas, el chip Bluetooth más pequeño del mundo, un elemento fundamental en la elaboración de los relojes inteligentes.

Nick Hayek no oculta que en el proyecto se incluye la posibilidad de que otros elementos tecnológicos de nuestro hogar y vida moderna se conecten al teléfono y sean gestionados desde el mismo. Y también destaca que algunas empresas tecnológicas se han puesto en contacto con Swatch para impulsar el proyecto de un sistema operativo distinto a los dos actuales, hartas de las exigencias de Google y Apple.

Swatch, que gestiona una veintena de marcas, afirma que el inicio de 2017 ha reflejado un cambio de tendencia y que ha experimentado un importante aumento del número de pedidos, especialmente en Asia.

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