Foto: Hermès
Tras un año de retos y mucha incertidumbre para el sector del lujo, Hermès ha demostrado que el ultralujo no entiende de crisis. Sus cuentas han demostrado estar muy por encima de sus competidores y de cualquier momento de cambio. Registró un aumento cercano al 50% en sus ingresos entre 2021 y 2024 y sus acciones (a 2.000 euros la unidad) despiertan tantas pasiones como sus exclusivos bolsos.
Porque es con ellos con los que Hermès estrecha los límites de la exclusividad. Sus icónicos Birkin y Kelly son tan minimalistas como misteriosos, exclusivos y difíciles de conseguir. Y no solo por lo que cuestan. Estos bolsos se han convertido en auténticos objetos de deseo para los compradores de lujo, que siguen demandándolos a pesar (para beneficio de la Maison) de su aumento de precios.
Podríamos decir que el Birkin es la quintaesencia del lujo silencioso. Ese que no necesita de logos ni grandes campañas de marketing para destacar. Quienes lo conocen, lo reconocen y lo desean. Y cuanto más discreto sea, mejor.
Tal y como hemos comentado en varias ocasiones, existen multitud de modelos de Birkin elaborados con distintos tipos de piel, en distintos colores y con distintos herrajes. Además de las peticiones ad hoc, las creaciones libres de los artesanos Hermès o las ediciones limitadas. Pero de entre todos los Birkin, hay un modelo especialmente discreto que quizás sea el que más concuerde con esta definición de silent luxury. Se trata del Shadow Birkin, un modelo “raro” creado en 2009 por Jean Paul Gaultier.
Por aquel entonces el diseñador trabajaba como director creativo de Hermès. Igual que en cocina, creó este bolso como el trampantojo de un Birkin a pesar de no tener ni placa, ni solapa, ni cierre. Es una pieza única, de un solo color, que efectivamente rinde homenaje a su nombre, pareciendo una auténtica sombra.
El Birkin 25 Shadow se relanzó en 2021 en cantidades limitadas y alcanzó, según explican desde Sotheby´s, los 52.000 dólares en abril de 2022. Sin embargo, su precio según los expertos “se ha estabilizado en torno a los 30.000 dólares” para quien lo compre nuevo, en tienda, con todo lo que eso supone.
Además del modelo “clásico”, Hermès lanzó en 2022 otra variante de este Shadow Birkin llamada Cut. Es un clutch similar al Kelly Cut en tamaño, pero con el diseño minimalista del Shadow. En su caso, se vende según los expertos de la casa de subastas “por unos 11.000 o 12.000 dólares” llegando a alcanzar los 14.000 en el mercado secundario.
Con todo, según los vendedores, “los precios de los bolsos Birkin varían de los 20.000 a los 35.000 dólares para cuero, mientras que los de pieles exóticas generalmente tienen un precio de 40.000 más. Los Himalaya, por su parte, pueden superar los 100.000 dólares“.
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