Al contrario de lo que se suele pensar, un buen traje puede servir para infinidad de funciones. En el fondo de armario de un hombre elegante nunca debe faltar un traje negro, azul marino o gris marengo. En la década de los 90, algunas empresas decidieron dejar de exigir a sus empleados el uso del traje. Principalmente las del sector tecnológico. En cambio, la banca, la abogacía y, en general, los hombres dedicados al sector servicios deben seguir usando esta prenda. Veamos las partes de un traje.
CHAQUETA. Es el elemento clave del traje, pues determina la silueta. Hoy en día se usa la chaqueta de botonadura simple con cierre de uno o dos botones. Si deseas abrocharte la chaqueta, usa solo el botón de arriba, dejando siempre desabrochado el inferior. Las chaquetas suelen presentar varios bolsillos exteriores e interiores. Los interiores están pensados para guardar la cartera o el teléfono móvil. Aconsejo no llenarlos para no distorsionar la figura. Los bolsillos exteriores tienen varias funciones.
El del lado izquierdo, a la altura del pecho, está pensado para llevar el pañuelo. En la parte inferior hay dos bolsillos, uno a la derecha y otro a la izquierda. Normalmente, si el traje es slim-fit, están sesgados; si el traje es clásico, los bolsillo están rectos. La manga de la chaqueta suele presentar en la parte inferior una hilera de botones. Si el traje es a medida, se puede desabrochar. En prêt-à-porter es difícil. La longitud ideal de la manga es la que permite ver la camisa entre 1 y 2 cm. La abertura de la espalda contribuye a la comodidad. Hay dos alternativas: simple o doble.
PANTALÓN. Esta prenda suele recibir menos atención que la chaqueta y, sin embargo, es la que más se desgasta. Por eso, recomiendo, si es posible, comprar dos pantalones. Siempre hay que utilizarlo con cinturón y, además, a juego con el zapato. La raya que discurre por la parte delantera de cada pernera debe ir marcada. Aporta un toque de elegancia, mientras que su ausencia sugiere desaliño.
El bajo con vuelta debes evitarlo si eres de estatura baja, pues hace que la pierna parezca más corta. Si decides usar dobladillo, debe medir entre 2,5 y 4 cm. Con o sin dobladillo, las perneras deben descansar sobre el zapato sin hacer arrugas. Las pinzas en la parte delantera de los pantalones hoy en día están es desuso. Los pantalones sin pinzas estilizan mucho más la figura y hacen que la caja y la pierna del pantalón se ajusten mucho más, dando un aire más moderno.
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