“La necesidad es la madre de la invención”

Llevo quince días recibiendo impactos sobre acciones sostenibles, primero en Sustainable Brands, y luego en la Jornada de Slow Fashion Next. Realmente, la necesidad es la que nos obliga a reaccionar. Después de escuchar opiniones y experiencias de tantos expertos y especialistas, llego a la conclusión de que lo primordial es el ahorro, la clave está en recuperar la cultura del ahorro.

Por otro lado, considero que no solo debemos poner interés en recuperar el planeta, sino también a las personas. Otra de las frases que ha aparecido en los discursos ha sido que “hay mucha gente trabajando en ello”. Es bastante esperanzador saber que las soluciones están en camino. O aquella otra frase de Barcelona Fashion Sumit 2015 “las marcas estamos aprendiendo de esta nueva era digital en la que estamos sumergidos a marchas forzadas” (Modaes.es, 2014).

Considero que el proceso creativo transcurre por un momento excepcional, pero exige de los diseñadores una actividad reflexiva importante. Hace días me llegó un vídeo donde se decía “la mitad de reflexión, conlleva a la mitad de acción”. Por lo tanto, si queremos crecer, hemos de dedicar tiempo a considerar los motivos de nuestros errores y equivocaciones. Pero sobre todo a realizar un esfuerzo de asimilación.

Es necesario enfocar la creatividad hacía la generación de confianza y de personalización. Ya que el entorno digital ha provocado el trasvase de la moda desde la calle a la red y ha bloqueado el desarrollo local frente a la producción global, como quedó reflejado en el Barcelona Fashion Sumit 2015 (Modaes.es, 2014).

Frente a estos procesos que se presentan como ineludibles, la corriente sostenible presenta alternativas como las que muestran las fotos pertenecientes a la exposición que se pudo contemplar en el Museo del Traje durante la celebración de la jornada del pasado día 25 de mayo. El mundo digital ha influido en los profundos cambios realizados en los últimos años en la industria y en el mercado de la moda. Estos han afectado a los equipos de personas, a los procesos y a los sistemas.

En mis habituales búsquedas bibliográficas, he localizado unas palabras de Sonia Delaunay escritas en 1931 en la revista Heim que me han sorprendido: “Lavenir de la mode es très clair pour moi – il aurá des centres de creations, des laboratoires des reserches, socupant de la mise ou point practique des vetements en evolutions constante, parallele oux necessités de la vie. Ainsi la mode deviendrá il democratique”. Sonia Delaunay supo ver ya desde 1931 dónde desembocaría la industria de la moda. Me despido con las palabras de Ben Sahl de Sevilla, citadas por Federico Granés (2003) en su obra “El vestido de la vida” y traducidas por Teresa Garulo; no hay vestido más sostenible que éste: “El vestido de la vida es un traje prestado”.