Foto: Florian Gagnepain Unsplash.
Mucho se habla de la adicción que sufren muchos jóvenes a las pantallas, un problema que crece y que hay que atajar, pero, en su justa medida, el uso de dispositivos y videojuegos tiene una contrapartida dulce para los usuarios que ven en este contenido de entretenimiento un momento para mejorar su salud mental, ya que ayudan a aliviar el estrés, a mejorar la creatividad e incluso a ampliar su círculo de amistades.
Esas son algunas de las conclusiones del estudio Power of Play, que ha publicado la Asociación Española de Videojuegos (AEVI) en colaboración con la he Entertainment Software Association of America (ESA) y Video Games Europe, tras una encuesta realizada por AudienceNet a 1.134 jugadores activos españoles, 12.847 a nivel mundial.
Divertirse es la razón principal por la que a nivel global las personas juegan a videojuegos, el 69% de los jugadores, pero los encuestados también señalaron otras razones, como entretenerse 63% o para reducir el estrés 55%.
En los 12 países en los que se ha realizado el estudio, el 71% de los encuestados afirmaron que jugar a videojuegos les ayuda a sentirse menos estresados. En España esa cifra asciende hasta el 75%, señalando también que los videojuegos les ayudan a sentirse menos ansiosos, el 66%, y menos aislados al conectarles con otras personas, el 56%.
Más concretamente, el 74% de los encuestados en España, 64% a nivel global, opina que los videojuegos ofrecen una manera saludable de enfrentar los desafíos cotidianos. Además, los jugadores también están de acuerdo en que los videojuegos brindan otros beneficios para la salud mental.
De hecho, el 80% cree que proporcionan estimulación mental y alivio del estrés, unos datos que superan a la media mundial del 75%, mientras que el 60% de los jugadores de nuestro país considera que los videojuegos les ayudan a sentirse más felices.
Una percepción avalada por algunos estudios, que señalan que ayudan a las personas a mejorar su estado de ánimo y, en determinados casos, a controlar los síntomas depresivos. Un estudio publicado en 2014 por la revista Pediatrics reveló que los niños de entre 10 y 15 años presentaban menores niveles de estrés cuando jugaban a videojuegos durante menos de una hora.
En 2021, una investigación publicada en Cambridge University Press arrojó conclusiones similares al revelar que “los adolescentes que pasan menos tiempo haciendo deporte y participando en juegos activos pueden divertirse más y mejorar su interacción social jugando a videojuegos más frecuentemente”. Además, otro estudio identificó que jugar 30 minutos a “videojuegos activos” en los que se promovía el movimiento físico reducía la irritabilidad y la depresión de los niños participantes.
Este beneficio también es aplicable al resto de grupos de edad. Una investigación publicada en Digital Games and Mental Health en 2020 hizo un seguimiento de personas mayores de 55 años mientras jugaron al popular Wii Tennis durante seis semanas en modo individual o multijugador (Li, 2020). Según los investigadores, los resultados sugerían que “los mayores de 55 años que participaban en exergames, videojuegos de ejercicio, en modo multijugador experimentaban menores niveles de soledad […] que quienes lo hacían en modo individual”.
De hecho, según la encuesta, los videojuegos proporcionan una plataforma para construir comunidades que de otra manera no sería posible físicamente. Más de dos tercios de los jugadores globales están de acuerdo en que los videojuegos presentan a las personas a nuevos amigos y nuevas relaciones. Casi la mitad de los jugadores globales ha conocido a un buen amigo, cónyuge o pareja a través de los videojuegos.
En España estas cifras aumentan, 72% de los jugadores españoles opinan que los videojuegos conectan a las personas y un 56% han conocido a un amigo, cónyuge o pareja a través de ellos.
Por su parte, los jugadores también dicen haber adquirido habilidades valiosas para la vida aplicables fuera del mundo virtual de los videojuegos. El 78% de los encuestados de España opinan que los videojuegos mejoran la creatividad, 73% a nivel global.
También, en España, el 74% de los jugadores están de acuerdo en que los videojuegos desarrollan habilidades cognitivas, de igual manera que otro 74% cree que sirven para fomentar la colaboración y el trabajo en equipo. El 64% de los jugadores españoles opinan que los videojuegos pueden mejorar las capacidades de resolución de problemas, matemáticas, tecnología, ciencia e ingeniería.
De hecho, una investigación publicada en Nature Human Behavior en 2022 descubrió que apenas dos horas de juego a la semana podían ayudar a mejorar la concentración y la comprensión lectora, mientras que un estudio de 2013 descubrió que jugar a Super Mario 64 podía contribuir a frenar la demencia y otros deterioros cognitivos similares.
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