Consejos para hacer la vuelta a la rutina un poco más llevadera

El final de las vacaciones está a la vuelta de la esquina y nuestro puesto de trabajo ya nos espera para comenzar una nueva temporada. No te deprimas y sigue estos consejos para afrontar la vuelta con optimismo.

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Las vacaciones ya están llegando a su fin, y la vuelta a casa, aunque no lo queramos reconocer, está cada vez más cerca. Evitar pensar en ello es una opción para seguir disfrutando de la vacaciones al máximo, sin embargo, puede que después la vuelta a la rutina se te haga muy cuesta arriba y te des un choque con la realidad. Por ello, para que seas capaz de seguir con tu día a día lleno de energía y positivismo, te traemos unos consejos para que tu vuelta de vacaciones sea más llevadera.

Aunque no sea reconocida por la OMS como una enfermedad, el síndrome postvacacional es una realidad que afecta a mucha gente al llegar el mes de septiembre. Volver a madrugar, cumplir con los horarios, el calor y la falta de tiempo libre puede afectarnos anímicamente y hacer que nos sintamos más irascibles o tristes. A esto habría que sumarle además, el arrepentimiento de no haber aprovechado para descansar más, los posibles kilos que hayamos cogido o el excesivo gasto de dinero. Algo que nuestra colaboradora Rocío Francoy señala que podría «evitarse en gran medida, cambiando los esquemas y condicionantes mentales que nos limitan por una actitud más positiva y mayor confianza en las propias posibilidades, junto con un plan de acción».

Volver a la rutina después de las vacaciones de verano puede producirnos el famosos síndrome postvacacional y hacer que nos sintamos tristes e irascibles

Márcate nuevos retos y prepara el cuerpo para la rutina diaria

Para evitar sufrir estos síntomas, lo mejor es que unos días antes de volver a casa empieces a planificarte un horario de descanso similar al que llevas en tu día a día normal. Esto le vendrá muy bien a los niños, a los cuales quizás nos cueste mucho hacer que se vuelvan a acostar a una hora temprana. De este modo, irás acostumbrando a tu cuerpo al nuevo horario y te costará menos descansar cuando estés inmerso en la rutina.

Otro de los hábitos que puedes ir cogiendo es practicar deporte. En muchas ocasiones, durante el verano no solo cogemos vacaciones en el trabajo, sino también en el gimnasio. Después de estar un par de semanas sin practicar nada de ejercicio, la vuelta a la rutina deportiva puede ser muy costosa. Si quieres evitar las molestas agujetas, empieza ya a moverte. Además, el deporte te ayudará a liberar la tensión y el estrés que te produce la vuelta a la normalidad.

Una buena forma de ir adaptándote a la rutina es practicar cada día deporte, además, te ayudará a liberar la tensión y el estrés que te provoca el final de las vacaciones

Aprovecha el buen tiempo y realiza diferentes actividades con tu familia y amigos

Una vez hayas regresado a tu casa, no te metas de lleno en el día a día, intenta sacar algo de tiempo libre y aprovéchalo para hacer actividades con tu familia. Como todavía no llega el frío, aún puedes hacer alguna excursión o salir a un parque de atracciones. Esto hará que sigas manteniendo tus lazos familiares y despejes un poco la mente del día a día. 

Finalmente, para afrontar la vuelta a trabajo con mejor ánimo y optimismo, te recomendamos que te marques retos. En muchas ocasiones, retarnos a nosotros mismos es la mejor manera de ponernos a trabajar duro y sin excusas. Esto hará que nos ilusionemos con nuestro trabajo, y al cabo de unos meses recoger todo el esfuerzo que hemos llevado a cabo.

Nuestra colaboradora Patricia Peyró recuerda que «si lo que queremos es mejorar nuestras condiciones o buscamos la promoción dentro de la empresa, habrá que idear una estrategia para conseguirlo», ya que «el ascenso será la consecución a una forma de trabajo, en combinación con una forma de ser flexible y positiva». Por ello, recomienda: mantener una actitud positiva, ser competitivo, hacer equipo, huir del pensamiento “loser” y tomar modelos positivos, además de no limitarse a los modelos convencionales y aplicar el lateral thinking.

Aprovechar el tiempo libre para pasar un rato con la familia y hacer actividades divertidas nos ayudará a afrontar la rutina de buena gana y con la mente despejada

Volver a la rutina del día a día no es tarea sencilla, y menos si has pasado uno de los mejores veranos de tu vida. Sin embargo, que empieces de nuevo a trabajar no tiene que significar el fin de la diversión. Aprovecha cada momento libre para reunirte con tus seres queridos y algún fin de semana prepara una escapada con la que podrás recargar pilas. Porque el invierno también puede ser la mejor época del año para divertirse y pasarlo bien.

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