Harry y Meghan Markle piden el voto contra Trump y en Buckingham no dan crédito
Los Duques de Sussex piden en un vídeo que los estadounidenses acudan a votar y muchos lo interpretan como un apoyo directo a Joe Biden en contra de Donald Trump.
El príncipe Harry y Meghan Markle han vuelto a poner a Isabel II en un serio dilema. Porque su última ocurrencia ha entrado de lleno en la estricta neutralidad política de la Familia Real Británica. Fuentes del Palacio de Buckingham citadas por los cronistas británicos que siguen las evoluciones reales ponen de manifiesto que la pareja ha cruzado una línea de no retorno. Los Duques de Sussex han pedido a los estadounidenses que ejerzan su derecho al voto en las próximas elecciones. Pero también de forma velada, Harry y Meghan piden que lo hagan en contra del actual presidente, Donald Trump.
El mensaje, grabado al parecer en el jardín de la lujosa casa que la pareja acaba de estrenar en Los Ángeles, ha sido difundido por la revista Time y forma parte de un reportaje especial sobre las cien personas más influyentes del mundo.
Harry y Meghan deberían renunciar a sus títulos como miembros de la realeza
En el mismo, el príncipe Harry reconoce que él no puede votar en dichas elecciones. Pero le dice a los votantes que «rechacen el discurso de odio, la desinformación y la negatividad online». A renglón seguido, la propia Meghan Markle insta a los estadounidenses a ejercer su derecho al voto en la que ha calificado como la «elección más importante de nuestra vida». Unos mensajes que han sido interpretados como un apoyo directo a Joe Biden en contra de Donald Trump.
Cronistas y expertos británicos creen que lo mejor llegados a este punto sería que ambos presentaran su renuncia a los cargos reales que aún ocupan. En especial el príncipe Harry, que debería presentar su renuncia al trono, para no entrar en conflictos de ningún tipo. Porque consideran que es inaceptable que un miembro de la Familia Real Británica pida a los estadounidenses que voten en contra de su actual presidente. Si esto no sucede, la reina Isabel II deberá ser la que tome cartas en el asunto y despoje a ambos de sus títulos para evitar cualquier tipo de confusión.