‘La Sirenita’ Meghan Markle y el príncipe Harry podrían perder sus títulos
La entrevista de los duques de Sussex genera un gran debate en la opinión pública, que reclama la retirada de todos los títulos nobiliarios.
Durante la entrevista del pasado domingo con Oprah Winfrey, Meghan Markle dijo sentirse como Ariel, la protagonista de La Sirenita, durante su estancia en Londres. “Dios mío. ¡Se enamora del príncipe y por eso pierde la voz!… pero al final, recupera la voz” decía la actriz frente Oprah y un impasible Harry en medio del gallinero que tienen en la vivienda de 14 millones de dólares que poseen en Los Ángeles. En ese entorno, lleno de huevos y gallinas, Markle confirmó que jamás se adaptó a las exigencias del cargo que ocupaba, como consorte del segundo hijo del heredero al trono.
Apparently my generation support this vomit-inducing cringefest. I say we raise the voting age to 60. pic.twitter.com/0n2xDkrucE
— Darren Grimes (@darrengrimes_) March 9, 2021
“Como un adulto que vivió una vida realmente independiente y que luego entra en esa institución que… bueno, es diferente de lo que creo que la gente se imagina, es realmente liberador tener el derecho y el privilegio de alguna manera a poder decir , ‘Sí, estoy lista para hablar’… y tomar una decisión por su cuenta y hablar por sí mismo”, sentenció Meghan Markle.
Meghan Markle y Harry presumen de familia lejos de Buckingham
Una vez explicados sus argumentos, la pareja se enfrenta ahora a la reacción de la gran mayoría de la opinión pública británica. Las primeras encuestas les sitúan a la altura de perder hasta el pasaporte. La que publica el Daily Mail establece que la mayoría de los británicos piensa que los duques de Sussex se equivocaron al dar su explosiva entrevista.
Una mayoría que cree que han defraudado a la Reina y que deberían ser despojados de sus títulos reales. El gran matiz es la diferencia de criterio entre los jóvenes y los mayores. Mientras los primeros se creen más la versión de la pareja, los segundos estarían junto a la monarquía.
Aunque realmente, lo que piensen los ingleses puede que ya les dé igual. El relato se ha construido para un público nuevo, no contaminado con la moralidad monárquica y bastante más sensible a cuestiones racistas y solidarias. Un público joven y estadounidense, al que se han presentado en horario de máxima audiencia y con el empuje de una de las periodistas más seguidas del país.
Tras la tormenta, la pareja se ha puesto delante del objetivo de la fotógrafa Misan Harriman para compartir su felicidad lejos de la familia real. Imagen en blanco y negro de una embarazada Meghan Markle que sostiene a su hijo Archie en brazos, mientras el príncipe Harry abraza a ambos.