Las mejores estaciones de esquí de España

Como cada año por estas fechas y si la nieve lo permite, comienza la temporada de esquí en España. Un deporte que mueve seis millones de personas en nuestro país, que el año pasado alcanzó una facturación de 115 millones de euros -con 5.400.000 forfaits vendidos sin contar el mercado añadido de hostelería, material de esquí, compras…- y que sitúa a España entre los lugares más reconocidos internacionalmente y el segundo destino europeo más económico para las vacaciones invernales, por detrás de Alemania, con un gasto medio de 222 euros.

Un deporte que cada temporada cuenta con más seguidores y que es considerado una fuente de negocio muy importante, lo que obliga a cada una de las 34 estaciones de esquí al aire libre con las que contamos en España, a subir su oferta de calidad y establecer diferentes estrategias de marketing para atraer al aficionado. Desde hace tiempo ya no es necesario desplazarse a los icónicos destinos del esquí mundial como Aspen (Estados Unidos), Saint Moritz (Suiza), Avoriaz (Francia), Mont Tremblant (Canadá), Val Gardena (Italia) o Innsbruck (Austria) para encontrar lugares paradisíacos donde practicar deportes de nieve y disfrutar de unas instalaciones modélicas.

Hoy, y aprovechando el pistoletazo de salida a la temporada, vamos a conocer cómo se presentan al público las principales estaciones en España. Si hay un punto de referencia, en cuanto a aceptación popular de las estaciones de esquí en nuestro país es Sierra Nevada. Situada en el Parque Natural de Sierra Nevada en Monachil (Granada), es la estación de esquí más meridional de Europa y la de mayor altitud de la península. La temporada pasada, gracias a la condición de sus pistas y su apuesta de calidad, recibió la visita de 1.150.814 esquiadores que la convirtieron en la más visitada del país, con una facturación de 34 millones de euros.

Un total de 125 pistas, 19 verdes (muy fáciles), 42 azules (fáciles), 50 rojas (difíciles), 7 negras (muy difíciles) y 7 parques de nieve, conforman la estructura durante 106 km esquiables, en los que se incorpora la posibilidad de realizar esquí nocturno en un entorno maravilloso (reserva de la biosfera) con los majestuosos picos Veleta y Mulhacén como mudos testigos de las bajadas. La estación produce un impacto económico superior a los 400 millones de euros y genera más de 8.500 empleos en temporada.

Baqueira Beret es otro de los lugares preferidos para la práctica del esquí en España, el favorito para los famosos y para la familia Real española que desde hace décadas acude a esquiar a sus pistas. Considerada como la mayor estación de esquí en España con una capacidad de transporte de 59.000 esquiadores/hora, está situada en el Valle de Arán, provincia de Lérida, en pleno Pirineo catalán y con el pico Aneto (el más alto de los Pirineos) en el fondo del paisaje.

Son 156 km de pistas esquiables, además de 1 telecabina, 20 telesillas, 546 cañones de nieve artificial y una gran oferta de alojamientos en torno al complejo. La bajada de antorchas y fuegos artificiales de fin de año se ha convertido en un ritual en la estación, así como el concierto de Año Nuevo de música clásica que se celebra en la iglesia de Baqueira.

La estación de esquí de Cerler, está situada en pleno corazón del valle de Benasque, en Huesca. En 2015 ganó el premio a la mejor estación de esquí de España en los ‘World sky Awards’ los Oscars del sector, que reconocen la calidad de sus servicios. Once escuelas de esquí y 225 profesores completan unos servicios entre los que se encuentran restaurantes, tiendas, gimnasios, guarderías, agencias de viajes y hasta vuelos en helicóptero o ultraligero y paseos a caballo.

También en el Pirineo aragonés y a 1 km de la frontera con Francia, justo a la entrada del Camino de Santiago, se encuentran las estaciones de Candanchú, la primera estación de esquí que se inauguró en España en 1928 y Astún, separadas por 3 kms y con autobuses que trasladan a los esquiadores de una estación a otra, de forma gratuita, en apenas 8 min. Casi 100 kms de pistas esquiables entre ambas y donde podemos encontrar uno de los fuera de pista más extremos del mundo, el famoso “tubo de la zapatilla” que requiere una habilidad y conocimiento del esquí muy alto.

Formigal en el Alto Gállego, la Molina y Masella (baja Cerdaña, Girona), Valdezcaray (en la riojana sierra de La Demanda), Valdesquí (sierra de Guadarrama), Leitariegos (León) y Alto Campoo (Cantabria) son otros puntos de referencia de un sector que vive en estas fechas su momento más esperado, aprovechando una orografía que sitúa en España como el segundo país más montañoso de Europa.

¿Se imaginan una estación de esquí sin electricidad? Pues eso es lo que nos ofrece la pequeña estación de Santa Inés, en el límite de las provincias de Soria y La Rioja, con apenas 1,7 kms esquiables, 3 pistas y 2 remontes y que no tiene electricidad y funciona con generadores. Un remanso de paz y tranquilidad con tan solo 5 trabajadores en este punto de nieve, de precios asequibles y que nos acerca a otra forma de disfrutar y entender el deporte del esquí y las actividades en la nieve.

Un amplísimo abanico de posibilidades y precios; los forfaits por día van desde los 51 euros en Baqueira hasta los 28 de Valdezcaray, pasando por 48 euros en Sierra Nevada, 40 en Cerler, 41 en Formigal o 18 en la pequeña Santa Inés. Ya solo queda ponerse los esquís y dar rienda suelta a nuestra ilusión.