(Foto: Gtres)
El escenario estaba preparado para ver a jóvenes estrellas como Jannik Sinner y Carlos Alcaraz. Sinner, el vigente campeón , llegaba con la esperanza de, además de defender su título, consolidar su posición como uno de los grandes del tenis. Su estilo de juego, una mezcla de poder y precisión, fue una vez más el espectáculo principal en la Rod Laver Arena.
Carlos Alcaraz, por su parte, sufrió el tener un cuadro más exigente que el italiano y enfrentarse en cuartos de final al gran Novak Djokovic que venía como cabeza de serie número 7, quien venía arrastrando unos problemas físicos que no le impidieron derrotar a Alcaraz, pero si tener que abandonar tras el primer set, su partido de semifinales contra el alemán Alexander Zverev.
La final masculina entre Jannik Sinner y Zverev fue un duelo de gran calidad tenística. Sinner, con su juego agresivo y su potente derecha, impuso un ritmo frenético desde el principio. Zverev, por su parte, trató de contrarrestar el ataque del italiano con su solidez desde el fondo de la pista. Sin embargo, fue Sinner quien demostró una mayor consistencia en los momentos clave, llevándose la victoria en tres sets.
Este triunfo no solo consolidó su posición como el nuevo rey de Melbourne, sino que también lo coloca como uno de los principales favoritos para ganar los próximos Grand Slams. El italiano solo había pasado ciertas dificultades- y lo fueron de carácter físico- en su enfrentamiento contra el danés Holger Rune, quien se quejó del excesivo tiempo de recuperación médica que se le había dado al en ese momento renqueante Sinner.
En su cuadro femenino, el torneo ofreció una de las sorpresas más grandes de los últimos años. Madison Keys, con una carrera marcada por momentos brillantes pero sin coronas de Grand Slam, se enfrentó a Aryna Sabalenka, la dos veces campeona y defensora del título, en una final inolvidable. Keys, con un tenis agresivo y un servicio impecable, logró vencer a la bielorrusa en tres sets, 6-3, 2-6, 7-5, demostrando que en el tenis, la perseverancia y la fuerza mental pueden ser más importantes que el lugar en el ranking (la norteamericana ocupaba el puesto 20 en ese momento).
Había eliminado tanto a Rybakina, numero 5 del Mundo como a la top mundial Iga Swiatek. Para tal difícil labor contó con un muy sólido y constante saque. al que sus duras rivales no supieron hacerle frente.
El torneo también estuvo marcado por la retirada de Novak Djokovic en semifinales debido a una lesión. Un momento que generó gran conmoción en el mundo del tenis y protestas por parte de cierto sector del público australiano. El serbio, con su palmarés en Melbourne, era considerado el gran favorito para llevarse el título. Su ausencia prácticamente dio vía libre a Jannik Sinner para lograrlo por segunda vez consecutiva.
Como novedades, destacar la introducción de los “coaching pods” durante los partidos generó un debate sobre el futuro del tenis y el papel de los entrenadores en la pista. Si bien esta innovación buscaba acercar aún más a los entrenadores a sus jugadores y dotarles de estadísticas de juego en tiempo real, también generó dudas sobre la igualdad de condiciones y la esencia del juego.
El tenis español ha vivido en Melbourne momentos agridulces, con la comentada eliminación en cuartos de final de Alcaraz. Poco bagaje para nuestros representantes masculinos, donde solo él y Alejandro Davidovich alcanzaron la segunda semana del torneo.
En el cuadro femenino destacar la gran actuación de Paula Badosa, quien tras eliminar de manera brillante a Coco Gauff (tercera cabeza de serie) accediendo a las semifinales de un Grand Slam por primera vez en su carrera, pero donde no pudo con la siempre complicada Aryna Sabalenka.
En la parte de dobles muy meritorio el papel de Sara Sorribes quien accedió a cuartos de final con su compañera Rakhimova. Si bien es cierto que en el partido para meterse en semifinales sufrieron una dura derrota de manos de las subcampeonas olímpicas Andreéva y Schneider.
Siempre queda en el recuerdo el gran Rafa Nadal quien tiene el honor de ser el único español que ha sido capaz de ganar en Australia. Lo hizo en dos ocasiones. De momento, su legado no ha podido ser recogido por nadie. Comienza una temporada donde esperemos que tanto Alcaraz como Badosa sigan brillando y en la que el resto de nuestros tenistas deben dar un paso al frente, aunque la tarea se antoja complicada.
LVMH experimentó un moderado incremento de las ventas durante su último trimestre fiscal. Unos datos… Leer más
Roger Federer, que disputó su último partido como profesional en septiembre de 2022 junto a… Leer más
París vive estos días su esperadísima y siempre única Semana de la Alta Costura. La… Leer más
Los bolsos, al igual que la ropa, los hay de verano y de invierno. Los… Leer más
Los reyes Felipe VI y Letizia viajaron ayer a Polonia para asistir al 80 aniversario… Leer más
"Muy melosa por dentro y crujiente por fuera, con el sabor del jamón presente de… Leer más