El comercio electrónico mueve la mitad de los productos falsificados en Europa
La pandemia ha disparado el comercio electrónico, pero también el riesgo de sufrir una estafa o comprar un producto falsificado.
El comercio electrónico es el principal canal de distribución de los productos falsificados en Europa. Así lo confirma un estudio elaborado por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea en colaboración con la OCDE. En el mismo se señala que más del 50 % de los productos falsificados que se incautan dentro de la Unión Europea proceden del comercio electrónico.
Una tendencia además que se ha acelerado durante la pandemia. Se estima que las ventas por Internet en todo el mundo aumentaron más de un 20 % en comparación con 2019. El estudio ha tenido en cuenta principalmente los datos obtenidos de incautaciones de contenedores procedentes del extranjero. Un sistema donde se oculta buena parte de la mercancía falsificada. Y aunque la gran mayoría de la misma procede de comercio entre empresas, se cree que el porcentaje de esos productos falsificados que luego se colocan a la venta en Internet es mucho mayor.
El comercio electrónico ha aumentado y también el riesgo de sufrir una estafa
En cuanto al origen de los productos falsificados, el estudio revela que China ocupa el primer puesto ya que más del 75 % de las incautaciones de productos falsos provienen del gigante asiático. Le sigue Hong Kong, con un 5,7 %; Turquía, con un 5,6 %; y Singapur, con un 3,3 %. China lidera también el ranking de productos falsos procedentes de comercio electrónico, con una cuota del 68 %. Artículos de perfumería y cosmética, productos farmacéuticos y gafas de sol son los artículos más falsificados. Y los que más se demandan en páginas web donde los compradores, en la mayoría de los casos, no saben que les llegará un producto falso.
Eso si llega, porque las fuerzas de seguridad han experimentado un gran aumento de las estafas online. Los fraudes incluyen ventas falsas, en las que el consumidor paga por un producto que nunca recibe. Pero sobre todo robos o suplantación de identidad o fraudes que tienen que ver con la inversión en criptomonedas.