En Hong Kong tienes una caja amiga
Min Cai, directora de la oficina de representación de CaixaBank en Hong Kong, cuenta en primera persona su experiencia al frente de un cargo dentro de unos mercados financieros más exigentes del mundo.
Hace un año que vivo en Hong Kong, ejerciendo como directora de la oficina de representación de CaixaBank en la zona. El trabajo implica, entre otras cosas, viajar con frecuencia hacia la isla vecina de Taiwán. Durante este corto período de tiempo, he podido conocer en primera persona una región moderna y cosmopolita, que, al mismo tiempo, sigue manteniendo tradiciones ancestrales. Se trata de una fusión perfecta entre Oriente y Occidente, lo que le confiere un carácter único e inigualable. Además, es una de las ciudades más seguras y más disciplinadas del mundo.
Buena locación geográfica y eficientes redes de transportes
Hong Kong tiene un total de 7,2 millones de habitantes, repartidos en apenas 1.100 km2, lo que la convierte en la ciudad con mayor densidad poblacional en Asia Oriental. Situada estratégicamente en la desembocadura del delta del Río de Perla, la zona con mayor concentración de industrias exportadoras de China continental, es también un área próxima a los países del Sudeste asiático, agrupados en la ASEAN (Association of Southeast Asian Nations). Además, Hong Kong cuenta con el mejor y más eficiente aeropuerto del continente y el mayor puerto franco. Taiwán, por su parte, tiene una extensión de 35.980 km2 y es la tercera ciudad con mayor densidad de población de Asia Oriental, con 23,5 millones de habitantes. Su situación geográfica, a unos 160 kilómetros de la costa este de la República Popular China y en un punto a medias entre Japón y Hong Kong, hace que sea uno de los lugares con mayor tráfico marítimo del mundo. Por ejemplo, el puerto de Kaohsiung es el decimosegundo más importante del mundo en tráfico de contenedores.
Hong Kong es una ventana de entrada hacia el mercado continental chino
El desarrollo económico de Hong Kong se basa en el mercado de capitales. El país dispone de una de las reservas de divisas más elevadas del mundo, con 349.124 millones de dólares a marzo de 2016, según datos del FMI. La actividad económica se concentra en la isla central de Hong Kong, mundialmente conocida como hub financiero con alrededor de 110 players internacionales. El sector servicios contribuye con casi un 93% del PIB y tiene a China como su principal socio comercial, de donde provienen el 49% de las importaciones. EEUU es el único país no asiático que logra situarse entre los cinco primeros puestos de ranking de proveedores. En cuanto a las reexportaciones (productos importados a Hong Kong, pero reenviados a otros países para su consumo), el principal destino es, de nuevo, la China continental
Por otro lado, Hong Kong ostenta el primer puesto en rapidez y simplicidad en la creación de una nueva sociedad, según publica Doing Business, un atractivo al que hay que añadir un tipo impositivo atractivo, sin aranceles para la mayoría de productos, un entorno de libre circulación de capitales y una estratégica localización cercana a la China continental y a los países que integran ASEAN. Además, la firma del tratado de libre comercio entre Hong Kong y ASEAN permite tener acceso a un nuevo mercado de 629 millones de habitantes.
En el caso de Taiwán, la economía está basada fundamentalmente en el sector exterior. Por este motivo, la suma de sus exportaciones e importaciones supone aproximadamente el 97 % del PIB. Taiwán es una zona altamente industrializada, con una clara especialización por zonas: concentración de industria electrónica y tecnológica en el Norte, maquinaria de precisión en el centro e industria petroquímica y pesada en el Sur.
Taiwán es el tercer país receptor de Inversiones extranjeras
Taiwán disfruta de superávit comercial con Estados Unidos, China, Hong Kong y la Unión Europea y, en los últimos años, se observa un creciente aumento del superávit de la balanza comercial con los países del entorno ASEAN. En su conjunto, el continente asiático, excluyendo el área de Oriente Medio, recibe el 6% de las exportaciones españolas. En el año 2016, Hong Kong se situó como el quinto mercado asiático para los productos españoles, tras China, Japón, Corea del Sur e India, y por delante de Singapur, Taiwán, Indonesia y Filipinas. La balanza comercial es claramente favorable para España, con 951 millones de euros en exportaciones españolas según los datos de 2016. Los sectores más importantes son bienes de consumo (39,39%) y productos industriales y bienes de equipo (36,69%); también destacan el sector agroalimentario (22,18%) y el de bebidas (1,74%).
La balanza comercial entre España y Hong Kong es altamente favorable a España
Pero también hay importantes inversiones en España procedentes de Hong Kong y su área de influencia. Además de las compras de viviendas y la inversión en equipos de futbol, cabe destacar el interés por el sector agroalimentario. En este sentido, el gobierno chino ha lanzado la iniciativa ¨One Belt, One Road¨, una recreación moderna de la antigua Ruta de la Seda con el objetivo de reforzar el comercio entre China y Europa a través de mejoras en infraestructura y logística. Una de las últimas inversiones amparadas bajo esta iniciativa es la adquisición de Noatum Holding Ports, la empresa portuaria líder en España, por parte de la sociedad de Hong Kong, Cosco Shipping Ports Ltd.
En cuanto a las relaciones comerciales entre Taiwán y España, estas se han caracterizado históricamente por un claro desequilibrio a favor del primero. Las exportaciones españolas a Taiwán representan un total de 485 millones de euros, frente a un volumen de importaciones desde Taiwán de 1.031 millones de euros, según los últimos datos de Icex. Es un dato que las empresas españolas deberían tener en cuenta, dado que, para el resto del mundo, Taiwán es un lugar cada vez más interesante para invertir. De hecho, según Doing Business Report, Taiwán es hoy el tercer país receptor de inversiones extranjeras. En los últimos tiempos, cinco grandes compañías, entre las que se encuentran la farmacéutica S-cubed o la compañía General Electrics, planearon inversiones en la isla por valor de 336 millones de dólares.
En mi opinión, tanto Hong Kong como Taiwán brindan grandes oportunidades de negocio con la región del sudeste asiático, un mercado que, día tras día, va adquiriendo un mayor peso internacional debido al elevado volumen de la demanda interna y el aumento de su poder adquisitivo. Por supuesto, siempre es recomendable que las empresas viajen para conocer el lugar de primera mano y hacer una valoración propia del potencial y las oportunidades que se les pueden presentar, algo en lo que podemos ayudar desde la oficina de CaixaBank en Hong Kong.