La Familia Real ya se encuentra en Mallorca para la primera parte de sus vacaciones y ayer dedicaron a la prensa su tradicional posado veraniego. Fue en un lugar novedoso, los Jardines de Alfabia. Un espacio situado en las faldas de la Serra de Tramuntana, con finca histórica del siglo XIII y huerto, que sobre todo las hermanas recorrieron con mucha curiosidad.
Así como sorprendieron con el enclave, en lo que a estilismo se refiere cumplieron con varios hitos que se repiten en las apariciones públicas de los cuatro. Doña Letizia se bajó de los tacones y se quitó las joyas para dar todo el protagonismo a sus hijas; estas eligieron el mismo calzado pero de distinta altura y, eso sí, cada una fue fiel a su estilo.
Como decimos, si bien la reina evitó destacar usando unas alpargatas planas y discretísimos pendientes, sí eligió el color de moda. La tendencia Barbiecore llegó con ella a Mallorca, que eligió para el posado de la familia real un vestido fucsia de Adolfo Domínguez.
Con tirante fino, escote en pico y largo midi, guardaba cierto parecido (por lo sencillo y veraniego) con el de Uterqüe que se puso el día anterior para clausurar el Atlàntida Film Fest. Sin embargo, al contrario que en esa ocasión, confió en complementos discretos pero igualmente a la moda. Su elección fueron unos pendientes de aro pequeños, un bolso de rafia y las alpargatas tipo cangrejeras.
También alpargatas lucieron sus hijas, aunque, como viene siendo habitual, de distinta altura. Mientras la infanta Sofía elegía unas con cordones anchos y cuña media; Leonor se decantaba por unas más altas, habituales en el zapatero de su madre. Eligió también unas alpargatas en tono azul el rey Felipe VI, a quien no podemos obviar después de las alabanzas que le dedicó recientemente la prensa internacional.
Siendo fiel a su estilo y a las temperaturas veraniegas escogió un atuendo en tonos claros de pantalón blanco y camisa remangada en tono azul.
Como decimos, tanto la infanta Sofía como la princesa Leonor volvieron a diferir no solo en el calzado, sino también en el estilo del atuendo. La mayor de las hermanas optó por un vestido verde esperanza que le favorece especialmente y que también eligió en los Premios Princesa de Girona.
Con botonadura central, cuello en pico, manga corta y largo midi, era un diseño low cost que firmaba Mango. Un diseño que costaba menos de 50 euros y que ya está agotado en la web. Lo completó con alpargatas beige de Mint & Rose y la melena suelta, solo con dos mechones recogidos.
En cuanto a su hermana Sofía, volvió a sorprender (y a ser fiel a su estilo) con un diseño muy colorido de inspiración étnica. Una prenda de Ba&sh Paris con manga francesa y largo por encima de la rodilla que le quedaba muy bien.
Con colores blanco, negro, rojo y fucsia, lo combinó con unas alpargatas en negro. En concreto el modelo Saura de Macarena Shoes que tiene desde hace tiempo.
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