Diego Ojeda: “Si eres honesto y currante tu recompensa llegará”

Dice que su profesión es la de músico y que por eso en la poesía hace lo que le da la gana. Diego Ojeda triunfa en ambos campos y nos cuenta cómo disfruta su éxito.

Daniel de la Peña. 01/06/2018

En el panorama literario, Diego Ojeda es uno de los poetas más seguidos de nuestro país. Ha despachado más de 100.000 ejemplares de sus obras y es un fiel asiduo de las redes sociales con más de 250.000 seguidores. Pero, ¿cómo lleva la fama un artista tan íntimo? ¿Le dará reparo compartir sentimientos que están a flor de piel? Para dar respuesta a  todas estas cuestiones y hablar sobre su nuevo trabajo, ‘Manhattan’, quedamos con el cantautor y poeta canario que, como muestra en todos sus trabajos, no esconde nada.

The Luxonomist: Diego, ¿qué va a encontrar el público en Manhattan‘?
Diego Ojeda: Como siempre, pero en este caso más todavía, un resumen vital de los últimos años en forma de canciones, poemas… en un nuevo formato que nunca había trabajado. Son una especie de textos modelados en los que cuento la verdadera historia que hay detrás de cada canción. Un montón de cosas que acompañan al libro que son muy especiales como fotografías mías, los papeles originales donde escribí por primera vez la canción, las partituras de las canciones… es un libro bastante completo que abarca varios géneros, por un lado está la música y por otro la parte escrita, pero van de la mano. Es mi mundo y en mi mundo nunca separo la poesía de la canción. Las canciones tienen una carga poética muy fuerte.

TL: Escribes, compones, vas a firmas, das conciertos… ¿Cómo haces para llegar a todo?
Diego Ojeda: Disfrutando, eso es lo más importante. Diciendo que “no” cuando siento que no puedo e intentando no comprometerme con más cosas de las que realmente siento que puedo abarcar. Estoy muy bien acompañado de personas que trabajan conmigo, que me cuidan y que están siempre a mi lado. Así es mucho más fácil.

Gracias a su amigo Marwan se animó a compartir su poesía

“En mi mundo nunca separo la poesía de la canción”

TL: ¿Qué es lo más complicado del mundo de la música?
Diego OjedaUn poco lo de siempre, dar el salto hacia un circuito más grande. Es verdad que se ha abierto un abanico muy grande para todos los músicos gracias a las redes sociales, a la democratización de Internet, a Spotify… Hay muchos canales, sobre todo digitales, que ha ayudado a que muchos músicos independientes, como yo, consigan posicionar su música en un lugar en el que tienen seguidores que van a verlos, compran sus libros, discos… pero es complicado sin un apoyo mediático dar un salto más grande.

TL: El éxito de tus libros con 100.000 ejemplares vendidos, ¿te lo esperabas?
Diego Ojeda: No, porque siento la música como una profesión, soy músico y hago canciones… Pero la poesía siempre me había acompañado de una forma más pasional y visceral lejos de la profesión, de hecho para mí no lo es. La diferencia está en que cuando escribo las canciones soy super consciente de que las van a escuchar muchas personas. Es otro escenario en el que tengo que guardar espacio para un estribillo, las estrofas, las rimas, un tiempo concreto…

En cambio en la poesía tengo la libertad absoluta para hacer lo que me dé la gana porque la escribo para mí, aunque la vida me ha regalado la suerte de compartirla. A a veces esto acojona un poco porque con ella cuento cosas muy personales, la vivo como algo muy mío que luego comparto… pero prefiero no pensarlo. También sé que al hacerlo estoy ayudando a otras personas con sentimientos como los míos y al final eso es lo más bonito.

“La poesía me da libertad para hacer lo que me da la gana”

Nuestro compañero Daniel de la Peña con Daniel Ojeda durante la entrevista

TL: ¿Cómo fue ese momento en el que dijiste “eso tan íntimo lo voy a compartir con todo el mundo”?
Diego OjedaFue por Marwan, un amigo cantautor y poeta que me animó a que publicara en Facebook algunos de mis primeros poemas y flipé con la respuesta de la gente. Fueron sobre todo amigos, porque lo hice desde mi perfil personal, pero en seguida me animé a seguir dándoles difusión. Luego vino una editorial pequeñita de Andalucía y nos propuso a Marwan y a mí publicar nuestros primeros libros y lo hicimos, pero sin muchas pretensiones. ¡De hecho, con ninguna pretensión!

TL: Creo que esa es la clave del éxito…
DO: Sí, pienso que basta que uno vaya persiguiendo el éxito para que no le llegue. En el arte es muy difícil acertar con algo que puede convertirse en muy mediático o muy viral, si lo buscas creo que no llegas. Obviamente, uno tiene que intentar, o yo por lo menos lo hago, buscar siempre la excelencia en todo lo que hace, aunque no te garantice que vaya a tener más éxito o menos.

Hay que hacer las cosas para uno, confiando en lo que hace, pero sin estar obsesionado con si gustarán o no. Si eres honesto contigo mismo, currante y buena gente, tarde o temprano te va a llegar la recompensa por algún lado. A mí me llegó después de muchos años de trabajo con la música en los que por ejemplo, sí había tenido repercusión en México. Mi libro ‘Mi chica revolucionaria’ fue la lanzadera para que muchas más personas me conocieran a mí y también mi música.

“Hay que hacer las cosas para uno mismo, confiando”

TL: Hablando de momentos señalados, ¿puedes decirnos uno en tu carrera?
DO: Hay dos momentos importantes hasta ahora: el lanzamiento de ‘Mi chica revolucionaria’ y el de ‘Amerizaje’, mi disco anterior. Ambos han supuesto un antes y un después en mi carrera.

TL: ¿Un recuerdo especial que lo disfrutarás más?
DO: ¡Muchas cosas! Cada vez que he derribado algún reto. Recuerdo la primera vez que canté en Libertad 8, la primera vez que di un concierto en Galileo y estaba lleno, la primera vez que canté en México en un auditorio con más de 1.000 personas… Son esos pequeños momentos, el cumplimiento de pequeñas metas… y por por las cifras sino porque son sueños que un día tuve y se han hecho realidad, como tocar en Libertad 8.

TL: ¿Algo que te apetezca mucho y vayas a hacer dentro de poco?  
DO: Voy a publicar un cuento infantil porque fui padre hace casi tres años y me ha cambiado la vida. Además, fui maestro y pedagogo durante diez años antes de dedicarme sólo a la música. El ser padre me ha inspirado mucho para hacer algo así y me hace mucha ilusión porque se lo voy a dedicar a mi hija. Saldrá para fin de año. 

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