Hace ya muchos años, cuando el confinamiento no era tan popular, Estefanía de Mónaco conocía a través de un vídeo que su marido, Daniel Drucret, no le era muy fiel. Su baile erótico con una bailarina sentenció su matrimonio. Hace unos días, Marta López, colaboradora de varios programas de Mediaset, se enteraba casi del mismo modo que la princesa, que el que hasta ese momento era su novio, Alfonso Merlos, vivía confinado en su casa con una chica que no era ella.
Su presencia en ropa interior mientras Merlos intervenía en un programa de YouTube también sentenció su relación. En tiempos de pandemia, las cosas se hacen virales aunque uno no quiera. El nombre de la tercera persona en discordia es Alexia Rivas, reportera de Socialité.
La primera reacción de Merlos la comuniqué yo mismo en el programa Viva la Vida: «No he sido infiel. Estoy tranquilo y no voy a dar explicaciones sobre mi vida. Cuando hay una hoguera, no se debe añadir más fuego». Inmediatamente, Marta López, que acudía esa tarde al programa para dar sus primeras declaraciones, estallaba.
Nos enseñó mensajes de WhatsApp enviados por Merlos. En ellos quedaba claro, sobre todo por la fecha del último antes de que se emitiera el polémico vídeo, que él no decía la verdad. «Yo no cambiaría ni uno de los días que he pasado contigo por nada. Ni un minuto», escribía Merlos el mismo día en el que se hicieron virales las imágenes.
Pero hay más mensajes. Como los que le enviaba una semana antes de la supuesta ruptura, estando ya con su nueva pareja: «Yo cariño estoy bien contigo. Quiero ser feliz contigo… Eres lo más importante de mi vida quiero ocuparme de ti, y que te ocupes de mí. Quiero compartir contigo los años más bonitos de mi vida y es tan fácil como esto».
Días después le decía: «Quiero todo (referente a la pedida de matrimonio que le había hecho días antes). Queda demasiado tiempo, somos mayores. La vida es muy corta. Esta es tu casa y yo soy tuyo…». Incluso había un mensaje donde el periodista le decía cómo quería que fuera ella vestida el día de su boda: “Me gustas con flores en el pelo. Es sensual, como tú».
A pesar de que el testimonio de López era muy creíble y las pruebas irrefutables, dejando patente que Merlos había mandado sucesivos mensajes de amor a Marta, hasta tres semanas antes de su «ruptura» y cuando ya estaba con su nueva pareja, la otra protagonista, Alexia, no se daba por aludida. La reportera, después de que todas las pruebas se pusieran sobre la mesa, simplemente tiró balones fuera y declaró en el programa donde colabora este domingo que: «Pagaría porque todo esto no hubiese pasado. No quiero que nadie sufra. Somos dos personas que se han encontrado y eso es parte de su pasado. Yo no he visto pruebas. Si tengo que tomar alguna decisión será de puertas para dentro. Lo que tenga que hablar será en privado y con quien lo tenga que hablar».
Alexia, quien ha sido además duramente criticada por su curriculum amoroso (algo que también debería aplicarse a los hombres y no solo a las mujeres), destacó que está tranquila: «Estoy serena dentro de todo. Es un tema complicado. Se han dicho muchas mentiras que dañan mi honor y mi trabajo. Me siento impotente ante lo que se dice. Yo no quería hablar, pero cuando te afecta tienes que salir y decir, basta ya». Minutos más tarde y con gran nerviosismo Alexia explicaba: «Yo no conozco su relación (la de Marta y Merlos) ni sé la verdad, porque no existía. Soy libre y tengo la capacidad de creer a quien considere. Seré yo la que tenga que tomar una decisión. No he matado a nadie».
Sin embargo, sus palabras no calaron ni convencieron a nadie. Alexia, actuaba como portavoz de su novio y no quería dar explicaciones sobre lo que ella considera «su vida “privada». Algo que lejos de ayudarla, enredaba más este galimatías. Se ganó una sonora crítica por parte de Mila Ximénez, que intervenía desde su casa para dar su opinión, e incluso por parte de la presentadora, María Patiño, quien no daba crédito a la actitud de la joven.
Finalmente, la reportera lanzaba un mensaje de advertencia a quienes quieran hablar sobre su vida: «Todas las falsedades tendrán sus consecuencias». Pues bien, está claro que no hay mayor ciego que el que no quiere ver. Las evidencias y las pruebas están ahí. Marta López no ha mentido y sí que ha podido demostrar su verdad. Veremos en qué acaba esta historia a tres bandas. O tal vez a cuatro o cinco… ¿quién sabe?
*Foto principal: Gtres.
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