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Vega Sicilia. Haz clic en la imagen para más información La editorial Turner presenta en Lavinia un libro en conmemoración a los 150 años de historia de la mítica bodega, seguramente el más alto exponente del concepto de lujo en nuestro país. En la presentación nos hablan de tres conceptos: el tiempo, el paisaje y el legado. Son solo tres palabras pero encierran en sí mismas todo el sabor y el aroma de la casa y del vino que produce...(¿o tal vez fue el vino quien acabó engendrando a la Casa?). El tiempo adquiere una dimensión más relajada. No es nuestro tiempo, es el de las cosas. El necesario para que la maduración y la crianza den su fruto. Ese devenir lento que produce, nadie sabe porqué, el misterio de un vino diferente. Bodega, Vega Sicilia Harry Eyres nos cuenta cómo Vega Sicilia es un destacado exponente del concepto “slow life” ligado al disfrute de las cosas pausadas y al gozo relajado de los sentidos. Tiene mucho que ver también con el cariño, el mimo y la delicadeza con que se hacen las tareas cotidianas en la bodega (curiosa contraposición a un mundo en el que impera la comida rápida y el concepto de inmediatez). La sensibilidad y la quietud que transmiten las fotografías de Gautier Dublond y las increíblemente bellas acuarelas de Rica Kawai, nos facilitan descubrir un paisaje muy bello pero austero. La Ribera del Duero es una región de páramos y de suelos pobres y pedregosos. Ese carácter severo de la tierra da su personalidad al vino. Las cepas padecen oscilaciones térmicas muy pronunciadas y esa dura uva castellana nace enfrentándose a un entorno nada benévolo y no se amilana ante las dificultades. Pablo Álvarez, actual consejero delegado y máximo representante del grupo familiar propietario de la firma, nos habla del legado recibido desde los tiempos del fundador Ignacio Lecanda. Legado es compromiso con lo recibido, respeto por la tradición y un gran amor por lo que se hace y por tratar de mejorarlo en lo posible. Significa también vocación y custodia de unos valores que deben de vivirse y transmitirse. Aromas, recuerdos, sensaciones... el vino es evocador Y claro, al final todo esto tiene su sentido cuando llegamos a las notas de cata. ¡Qué suerte la de Serena Sutcliffe!..¡qué envidia!....¡qué gozada el lujo de probar cosechas desde 1922 hasta las actuales! Aromas, recuerdos, sensaciones, sabores, gustos...el vocabulario es muy amplio pero no es sino un intento de describir las emociones que produce tomarlo, el despertar de los sentidos, la belleza interna que despierta... Yo que no dejo de ser un aficionado, me acerco con respeto y humildad. A mí me sabe a reposo, a paz, a ver la vida con otros ojos, a estimularte para vivirla de manera diferente. Y funciona...de momento me ayuda a escribir con alguna soltura este artículo.

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